Desde hace tres meses 25 trabajadores realizan las labores de limpieza en el interior y exterior del centro penitenciario
Para noviembre se espera que el Centro de Rehabilitación Social (antes CEFERESO) sea reabierto con reos trasladados de los penales de Saltillo y Torreón, aunque se desconoce la fecha exacta por el hermetismo de la Secretaría de Seguridad Pública, por seguridad, pero todo está programado que las cuadrillas de limpieza y que habilitan los circuitos de cámaras y eléctricos deben tener todo listo para ese mes.
Juan Antonio García Granados, coordinador del Departamento de Limpieza Municipal, informó que por orden del alcalde Mario Dávila Delgado, las cuadrillas de limpieza permanecerán hasta noviembre porque van a ingresar a los internos de otros penales del estado y por seguridad, ellos ya no deben estar trabajando ahí.
Sorpresivo. "De un día para otro nos van a decir que ya no, al momento que vayan a llegar los reos, porque las condiciones cambian", expresó.
Desde hace tres meses 25 trabajadores realizan las labores de limpieza en el interior y exterior del centro penitenciario, dijo, divididos en cuadrillas de cinco, entre hombres y mujeres.
Destacó que estos trabajadores son obreros de Altos Hornos de México, quienes fueron contratados por el municipio para ese fin y darles empleo.
El coordinador manifestó que ellos están limpiando solo lo que les indican los encargados del penal porque no operará a toda su capacidad, solo unos 3 a 4 módulos al interior, que son los que asearon. También ven que hay otros trabajadores que mandó el estado que habilitan las cámaras de seguridad y los circuitos eléctricos.
Comentó que el sitio aún no tiene camas o mobiliario en el área de las celdas.
En pasado 3 de agosto, El Tiempo ingresó al CERESO y observó que ya había electricidad, teléfono y estaban habilitadas varias oficinas en el primer piso, mientras que en la planta baja había mobiliario como archiveros y limpiaban el interior y en el exterior con deshierbe.
