El Celtic, con tantos del hondureño Luis Palma y de Gustaf Lagerbielke, ganó 2-1 al Feyenoord y sumó su primera y única victoria en una errática fase de grupos de la Champions League del conjunto escocés.
Ambos fueron los hombres más insistentes del partido, sobre todo Luis Palma, que con su acierto destapó su gran temporada. Alcanzó los nueve tantos en su puesta en escena en las filas del conjunto escocés (dos los marcó con la camiseta del Aris Salónica griego antes de ser traspasado con el curso ya iniciado) y camina con paso firme en su aventura con el Celtic.
Su estreno en la máxima competición continental con la diana al Atlético de Madrid tuvo su prolongación en la última jornada frente al Feyenoord. Dio esperanzas a su equipo de lograr su primera victoria, que llegó tarde cuando ya estaba todo perdido.
La realidad era dura para ambos clubes, que disputaron el partido de los derrotados, de los dos equipos sin nada en juego en el grupo del Atlético de Madrid. Pocos alicientes tenían más que el honor y el dinero por la victoria, 2,8 millones de euros en juego por los tres puntos, una cantidad interesante para cualquier entidad con ganas de engordar el interior de su caja fuerte.
El Celtic, condenado a la última posición tras sumar sólo un punto en los cinco partidos precedentes, y el Feyenoord, clasificado para la Liga Europa y matemáticamente alejado de los octavos de final, tuvieron que afrontar uno de los duelos con menos interés de la jornada.
Con ese guion, el Celtic se mostró como un equipo más combativo. No podía defraudar a su afición, a la que quería brindar su primera victoria que al final sería la única en la presente edición de la Liga de Campeones. Y con el paréntesis de un golazo anulado a Santi Giménez por fuera de juego, casi todas las ocasiones fueron para la escuadra escocesa.
A los veinte minutos asustó con un disparo desde dentro del área de Furuhashi que salvó el portero Justin Bijlow; y, a la media hora, dio en la diana desde los once metros por un derribo dentro del área de Ramiz Zerrouki sobre Benoit Bastien. Luis Palma no falló y sólo pudo contestar al borde del descanso Lutsharel Geertruida con un disparo que golpeó en un palo de la portería defendida por Joe Hart.
El segundo acto fue prácticamente un calco del primero. El Celtic llevó el peso del partido y acaparó casi todas las ocasiones claras. Luis Palma rozó el doblete y Bijlow, con una gran intervención, evitó la felicidad plena del delantero hondureño, que, sustituido a falta de un cuarto de hora, vio desde el banquillo como Yankuba Minteh empataba el partido para enfriar a una grada que se calentó con un disparo al larguero de Callum McGregor y que explotó con el definitivo tanto de Lagerbielke.
Al final, el buen partido de Luis Palma y un gran cabezazo de su compañero, bastaron al Celtic para llevarse tres puntos o, lo que es lo mismo, 2,8 millones de euros.
