El movimiento y bloqueo de la arteria principal de Monclova que realizaron los obreros de Altos Hornos de México donde pararon prácticamente la circulación de acceso a la región centro de Coahuila demostró no solamente una protesta de trabajadores por la falta de salarios, sino que también desnudó y dejó al descubierto la falsedad e hipocresía de los candidatos que buscan la legislatura local al manos de los distritos 5 y 6 de cualesquier partido político.
Es cierto que hubo mucha molestia social, es cierto que incomodaron a miles de personas que usan esta vía para ir a sus lugares de trabajo o regresar de ellos, es cierto que imprudentemente impidieron el libre tránsito de personas enfermas que acudían a un hospital, es cierto que miles y miles más proyectaron en redes sociales su descontento por esta acción, es cierto que fue triste ver a cientos de adultos mayores bajarse de autobuses para seguir su trayecto a pie, eso y muchas otras cosas más son totalmente ciertas, pero también es cierto que los trabajadores o la clase obrera tiene que tomar estas medidas para que sean tomados en cuesta por parte de las autoridades tanto laborales como de la Iniciativa Privada, es un derecho que cualquier ciudadano puede tomar, a un costo muy pero muy alto, como el de atrasar insumos o materia prima que tenía que llegar a las empresas de esta región, llegadas puntuales a citas de salud, laboral o simplemente familiar.
Obligaron a muchos a tomar vías alteras por terracerías que casi nadie conocía, pero que a final de cuentas lograron llegar a sus destinos por la "imprudencia" de unos cuantos obreros.
Obreros que solo buscan lo justo, su sueldo, su ahorro que no ha sido entregado desde diciembre, su empleo y lugares dignos para laborar, donde haya agua potable, energía eléctrica y la seguridad de que recibirán en tiempo y forma sus ingresos y bonos que contractualmente han logrado a través de verdaderas luchas sindicales del antaño.
Pero a pesar de todo sin querer queriendo demostraron más de lo que pretendían porque pusieron al descubierto la hipocresía social con la que juegan siempre los candidatos y funcionarios públicos justo a pocos días de haber iniciado las campañas para la gubernatura del estado y sus diputaciones.
El miércoles fueron tres horas de protesta, tres horas en las que quemaron llantas y el disturbio público parecía salirse de control y a pesar de ello ninguna autoridad se acercó con los obreros y mucho menos los candidatos que buscan las diputaciones locales.
Lo único que se observó fue la presencia de corporaciones policiacas como la PCC y elementos del Ejército Nacional, pero ¿Dónde estuvieron las autoridades que presuntamente tienen relación con la organización sindical de los obreros de Altos Hornos de México?
¿Dónde estuvo la Secretaría del Trabajo? Que finalmente es la que puede intervenir en este tipo de acciones o mínimo las subsecretarías que existen en cada región del estado.
Lo interesante del asunto es esperar a ver si los candidatos de los distritos 5 y 6 tendrán en su momento el enorme cinismo para acercarse a este sector obrero y pedir su apoyo para la contienda electoral.
Se supone vivimos le época de los besos y abrazos y el "apapacho" más falso que se vive en la historia de cada político. El miércoles cientos de ciudadanos que laboran como obreros alzaron la voz de ayuda, protestaron para ser escuchados y apapachados, pero la ayuda, el apoyo, el oído del funcionario o político nunca apareció. Los candidatos brillaron por su ausencia, los funcionarios anduvieron de vacaciones o a menos que ya sepan que el organismo sindical ya está agonizando y hay que dejarlo morir. ¿Dónde están esos políticos falsos que se jactan de decir, "mis amigos los obreros"?
