El pasado 25 de marzo, Alegna dio la marca mínima establecida por la Federación Internacional para los próximos Juegos Olímpicos.
En el apartado de honores de Alegna González dentro de su perfil en la World Athletics destaca un campeonato mundial juvenil en 2018, un quinto lugar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y un séptimo lugar el Campeonato Mundial de Eugene 2022. La proyección sostenida de la atleta de 24 años le ha permitido superar con éxito la delgada línea que divide a una promesa de una realidad. La clave está en su filosofía, como una metáfora de la marcha misma, donde los pies siempre deben mantener contacto con la tierra.
“Yo creo que cada competencia es diferente, y cada que regresas de una tienes que mantener los pies sobre la tierra, porque tienes una competencia y la ganas, pero tienes otra y es completamente diferente, si no te va bien tienes que afrontar rápido ese reto para superarlo, tienes que decir bueno, ahora tengo que hacerlo mejor, tienes que estar en lucha constante no solo con los demás, sino contigo misma”, contó en entrevista.
Alegna nació en Ojinaga, Chihuahua, una ciudad fronteriza de poco más de 30 mil habitantes y en la cual se asienta una de las industrias maquiladoras más importantes del país. Poco a poco, sin embargo, el eco de aquella tierra evoca a la andarina que está llamada a regresar a la marcha mexicana a los primeros planos en París 2024.
El pasado 25 de marzo, Alegna dio la marca mínima establecida por la Federación Internacional para los próximos Juegos Olímpicos. La marchista ganó la tradicional carrera Dudinska 50 con un tiempo de 1:28:09, registro que le permitió superar la frontera del 1:29:20, tiempo necesario para los 20 kilómetros femenil.
