El personal tuvo una rápida acción y atención para su cliente.
Un suceso inesperado puso a prueba la capacidad de respuesta y solidaridad del personal de la tienda Del Sol, cuando un hombre de la tercera edad, acompañado de su esposa y nieto, sufrió un desmayo mientras realizaba sus compras.
La escena se volvió caótica cuando el nieto, visiblemente asustado, comenzó a llorar y gritar pidiendo ayuda para su abuelito. El equipo de la tienda, entrenado para situaciones de emergencia, actuó con admirable rapidez y eficacia.
Con gran profesionalismo, las trabajadoras retiraron al niño de la zona afectada, brindándole el apoyo emocional necesario.
Simultáneamente, otro grupo de empleados, con algo de alcohol y conocimientos de primeros auxilios, se acercó al hombre mayor. Con diligencia y calma, iniciaron los procedimientos necesarios para estabilizarlo mientras se esperaba la llegada de los socorristas de Cruz Roja, ya que se temía fuera un posible infarto.
Las autoridades señalaron que el incidente resalta la importancia de contar con un personal preparado para emergencias en lugares de alto tráfico como las tiendas. La pronta y coordinada respuesta del equipo de Del Sol fue crucial para garantizar la seguridad y bienestar del cliente afectado.
Finalmente, los socorristas de Cruz Roja llegaron al lugar y trasladaron al hombre a un hospital para que recibiera atención médica más especializada.
El episodio no solo destacó la eficacia del personal de la tienda en situaciones críticas, sino también la importancia de contar con medidas de seguridad y capacitación adecuadas para responder rápidamente a emergencias médicas en entornos públicos.
