Nuevamente acudieron a las oficinas regionales para levantar un acta acerca del maltrato que han recibido
Luego de que, una madre de familia denunciara la agresión física y psicológica que su hija sufrió a manos otras alumnas y personal de la secundaria, Emiliano Zapata número 2 al buscar apoyo en la supervisión, solo recibieron malos tratos, en donde la supervisora presuntamente justificaba las acciones de los trabajadores y el probable mal manejo que llevaron en este caso de acoso escolar que también los involucró.
De acuerdo a Erika, madrina de la niña, fue Salma Ortiz, supervisora de zona secundaria, quien las recibió de manera prepotente e interrogó a la menor de 13 años con preguntas fuera de lugar, algunas de ellas era que si tenía novio y como se portaba en la secundaria, ya que, tal vez su comportamiento era una causa para que la trataran mal en el plantel.
Ataque. La menor cursa el segundo grado, pero desde que ingresó ha sido molestada por sus compañeras y al tratar de refugiarse con los directivos y pedir auxilio, la subdirectora le dice que no exagere o en ocasiones hasta la insulta. El hecho más preocupante fue el de una agresión que sufrió en la hora del receso y ese mismo día otra golpiza por más de 5 chicas en la entrada del plantel a la hora de la salida, la madre Azeneth aqueja que en ese momento ningún maestro o subdirectora quien observó la pelea la mando llamar.
Sostén. Al pedir apoyo en las oficinas regionales, el subdirector Félix Rodríguez Ramos los envió con la supervisora de zona, pero las 2 mujeres preocupadas de la niña nunca pensaron que recibirán la peor actitud que podría existir, “le decía a la niña que no echará mentiras porque a veces se portaban mal y no querían decir, que tal vez estaba confundiendo las cosas” expreso la madrina. Agregando que, en todo momento, pareciera que solo trataba de justificar al personal de la secundaria en lugar de brindarles apoyo con la adolescente que sufrió un esguince en el cuello y un estado psicológico muy venerable y triste.
Es por ello que acudieron nuevamente a las oficinas regionales para levantar un acta acerca del maltrato que han recibido y sostuvieron que, si no se les da una respuesta de justicia, acudirán hasta las oficinas ubicadas en Saltillo.
