5 interrogantes cruciales en torno a Jimmy Garoppolo y Raiders
Ha sido un receso de temporada bastante movido hasta el momento para Las Vegas Raiders, quienes se despidieron del veterano quarterback titular de los últimos nueve años Derek Carr, y firmaron a Jimmy Garoppolo a un convenio de tres temporadas y 72.75 millones de dólares de agencia libre sabiendo que requeriría cirugía en el pie izquierdo por una lesión sufrida el pasado 4 de diciembre, cuando jugaba aún para los San Francisco 49ers.
Por un lado, los Raiders invirtieron bastante en un producto dañado. Por el otro, sabían exactamente en lo que se metían cuando acordaron términos contractuales con Garoppolo, como quedó evidenciado por el hecho de que el equipo obligó al quarterback a firmar una responsiva que sustituyó la necesidad de que Garoppolo aprobara una prueba médica antes de firmar con Las Vegas.
Garoppolo, quien se sometió a la cirugía en marzo, ha estado en el complejo de los Raiders y en las lecciones del salón de clases, pero no ha participado en ninguna sesión sobre el campo de juego de las actividades organizadas del equipo, que son voluntarias, ni el minicampamento obligatorio, elevando interrogantes y el nivel de angustia de los aficionados.
¿Cuán preocupados están los Raiders respecto al status de Jimmy G ahora, y cuán preocupados deben estar?
Públicamente, nada.
"No siento ansiedad", manifestó el head coach Josh McDaniels con una sonrisa cuando se le preguntó acerca de Garoppolo. "Ustedes podrían sentir ansiedad. Yo no tengo ansiedad".
¡Vaya! Eso nos llevó a la obligada siguiente pregunta: "¿Cómo es que no hay ansiedad?".
McDaniels volvió a sonreír.
"No me preocupo de cosas que no puedo controlar", respondió. "Tengo muy buena información que me dice que vamos a estar muy bien. Nada ha sucedido que haya cambiado eso, y por eso es lo que siento".
El coach agregó que no pondría "un plazo o un día" para que Garoppolo apareciera sobre el campo. Con todo y eso, uno supondría que quieres al jugador que se desempeña en la posición más importante en los deportes del conjunto recibiendo la mayor cantidad de repeticiones de receso de campaña con sus nuevos compañeros, ¿no es así? Por desgracia, el hecho de que Garoppolo posee experiencia previa en el sistema de McDaniels --hace siete años con los New England Patriots-- hace que valga su peso en plata (¿y negro?). El hecho es claro: los Raiders estaban lo suficientemente preocupados como para insertar la responsiva en su contrato, pero no tanto como para mantenerse alejados de él.
¿Cuánto le costaría a los Raiders librarse del contrato, y como tal, cuánto arrepentimiento deben sentir por no ascender en el orden de selecciones del draft para tomar a un quarterback?
Básicamente, nada ... mientras que la separación se base en la lesión en el pie, y Garoppolo no pueda pasar una examinación física. El bono por firmar de Garoppolo, de 11.25 millones de dólares, fue convertido en el ya existente salario base de 11.25 millones de dólares para el 2023, y los Raiders no deberían nada por el resultante salario base de 22.5 millones en caso de que el contrato sea terminado por cualquier motivo relacionado a la responsiva. No obstante, la responsiva queda sin efecto si Garoppolo permanece con el equipo dos días después del partido final de los Raiders en la campaña del 2023, de acuerdo a una copia de la responsiva publicada por NFL Network.
Sí, todo eso lleva a pensar que los Raiders, quienes fueron vinculados a Bryce Young de Alabama y C.J. Stroud de Ohio State, debieron ser más agresivos en la persecución de un pasador en el draft de este año. Sin embargo, como dijo McDaniels, no hubo "sorpresas" en la salud de Garoppolo, además de que no hubo una "necesidad" interna de ascender en el orden de selecciones, con ese par de pasadores siendo elegidos con los dos primeros turnos globales, respectivamente. Además, los Raiders no intentaron escalar al N° 1, pero el paquete de los Carolina Panthers conformado por el receptor abierto DJ Moore, sus selecciones de primera y segunda ronda (N° 9 y N° 61 globales) del draft de este año, su selección de primera ronda en el 2024 y su selección de segunda vuelta del 2025 superó cualquier cosa que los Raiders hubieran podido ofrecer.
Si hay algún arrepentimiento, quizás sea el permitir al quarterback suplente Jarrett Stidham emigrar en la agencia libre a los Denver Broncos, rivales en la AFC Oeste. Especialmente, dada la experiencia de Stidham y una mínima muestra de éxito en el sistema de McDaniels cuando inició los dos partidos finales de Las Vegas de la campaña pasada, cuando le prendió fuego a la defensiva de los 49ers para 365 yardas por pase y tres envíos de touchdown, y se ganó el vestidor extendiendo una jugada y soportando un violento golpe en su pase de anotación de 60 yardas para Davante Adams.
Si hubiera estado Stidham tomando repeticiones con el primero equipo durante las actividades organizadas del equipo y minicampamento, en lugar de Brian Hoyer, quizás el ritmo cardiaco de la Nación Raider estaría latiendo más despacio.
¿Cuáles serían las opciones de Garoppolo en caso de que no pueda jugar?
Oh, ¿quieren conocer los escenarios apocalípticos? Bueno, es lo justo. Digámoslo así: en caso de que los Raiders corten a Garoppolo, ¿significaría que no pasó la prueba médica, ¿verdad? Entonces, ¿cómo pasaría la prueba médica con otro club? Bueno, doctores diferentes ven cosas diferentes; y dado el momento de una movida tal (el campamento de entrenamiento, o incluso el mes de septiembre), Garoppolo --quien no hubiera recibido dinero de los Raiders-- tendría que buscar firmar con alguien más como un suplente.
Los 49ers parecerían ser el candidato ideal, dada su familiaridad con el equipo, pero ellos tomaron otra ruta al añadir a Sam Darnold a un grupo de pasadores que ya cuenta con Trey Lance y Brock Purdy. Posiblemente, el head coach de los Miami Dolphins, Mike McDaniel, quien estuvo con Garoppolo con los Niners, podría usarlo como póliza de garantía para Tua Tagovailoa. O, quizás, los Raiders simplemente lo firman a un convenio mucho menor, para permitirle sanar por completo en las laterales.
¿Cuáles son las opciones de los Raiders en caso de que se deshagan de Garoppolo, y hay modo de que Tom Brady se uniforme en plata y negro para la próxima temporada?
Como notamos arriba, Hoyer, quien cumplirá 38 años de edad en octubre y está por iniciar su temporada N° 15 en la NFL --pero primera con Las Vegas-- ha estado recibiendo repeticiones con el primer equipo. El novato Aidan O'Connell ha brillado por momentos, pero también existe un motivo por el cual estuvo disponible hasta la selección final de la cuarta ronda, N° 135 global, siendo el octavo pasador reclutado. Luego, está Chase Garbers, un novato no reclutado del año pasado que nunca ha recibido una jugada oficial de NFL, pero quien posee la mayor cantidad de experiencia reciente en el sistema de McDaniels
Si los Raiders estuvieran obligados a buscar en otro lado, el agente libre Carson Wentz parecería la mejor opción. El coordinador de juego aéreo de Las Vegas, Scott Turner, obtuvo experiencia con Wentz como coordinador ofensivo de los Washington Commanders el año pasado, si eso ha de valer algo.
Eso nos lleva, como siempre, de regreso a 'Tuck Rule Tom'.
Sí, el villano de aquella noche nevada en Foxborough de enero del 2002, que decantó en la caída de los Raiders al tiempo que inauguró la dinastía de los Patriots, ha dicho que está felizmente retirado. Pero, hasta Michael Jordan salió del retiro en dos ocasiones, y Brady salió del retiro el año pasado.
Brady ya es muy cercano con el propietario de los Raiders, Mark Davis. Brady es dueño de una parte de las campeonas reinantes de la WNBA, Las Vegas Aces, propiedad de Davis, y un interés minoritario en los Raiders. Y, aunque Brady necesitaría una improbable aprobación de los dueños de la NFL para bajar del palco de dueños al campo de juego, esa aprobación solamente sería necesaria en caso de que ya fuera copropietario. Y, los dueños no han votado esa aprobación, todavía; eso probablemente no sucederá hasta octubre.
Sí, es improbable que Brady, quien es extremadamente cercano a McDaniels, incumpla su palabra y se vuelva a retirar; pero nunca hay que decir nunca, y cosas más raras han sucedido con esta organización. Al menos, si Brady se uniera a los Raiders en cualquier papel, tendría que admitir que la jugada de la Tuck Rule fue, de hecho, un balón suelto, ¿no es así?
"Cien por ciento", dijo McDaniels. "Sin duda".
¿Es momento de tirar la campaña por la borda para ir por Caleb Williams y/o Drake Maye en el próximo draft?
En segundo lugar, los Raiders probablemente poseen demasiado talento individual en ciertas posiciones --cuentan con All-Pros en el receptor abierto Adams, corredor Josh Jacobs y pateador de lugar Daniel Carlson; y jugadores de Pro Bowl en el ala defensiva Maxx Crosby y pateador de despeje AJ Cole-- como para caer tanto hasta una posición donde puedan acceder a Williams, el ganador reinante del Heisman Trophy para USC, o Maye, estelar de North Carolina.
Y, si los Raiders terminaran con la peor marca en la liga, uno o más de esos jugadores destacados probablemente sería traspasado, y la base sólida bajo la cual operan McDaniels y el gerente general Dave Ziegler, se tambalearía. Además, la posición de quarterback no es el único hueco en una plantilla en reconstrucción, nuevamente.
¿Sienten ansiedad ahora? Guárdenla para el campamento de entrenamiento, en caso de que no funcione lo de Garoppolo.
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