Un trauma emocional genera experiencias inquietantes, abrumadoras, perturbadoras, que van más allá de las experiencias usuales de las personas.
El trauma emocional es una herida psicológica que puede ser provocada por situaciones diversas y a continuación te decimos los comportamientos de una persona que sufre de este problema.
Un trauma emocional genera experiencias inquietantes, abrumadoras, perturbadoras, que van más allá de las experiencias usuales de las personas.
5 comportamientos de una persona que sufre de trauma emocional
El trauma emocional o psicológico es el daño a la estructura psicológica de un individuo después de vivir un evento muy angustioso o aterrador. El trauma puede afectar la capacidad de sobrellevar o funcionar normalmente en la sociedad y a continuación te mostramos los comportamientos que pueden tener estas personas:
Depresión y ansiedad
Es probable que la ansiedad siga a un evento traumático. Este sentimiento, a menudo deja al individuo con la sensación de que nunca podrá relajarse. Las personas con antecedentes de trauma explican que se sienten como si todo el tiempo estuvieran en una condición de hipervigilancia.
Ira
De acuerdo con el Departamento de Asuntos de Veteranos de los Estados Unidos, la ira puede representar una carga grave para una víctima de trauma. Una experiencia vivida que generó trauma también puede producir cambios en el cerebro que dificultan el control de las emociones de la víctima.
Miedo intenso
Las experiencias traumáticas están conectadas al sistema límbico (emocional) del cerebro. Las exploraciones cerebrales de los individuos con trastorno de estrés postraumático confirman las diferencias con respecto a la aparición y eliminación del miedo en comparación con las víctimas sin este trastorno. Las víctimas de trauma suelen tener una respuesta de miedo más intensa.
Problemas para dormir
Los trastornos del sueño como el insomnio y el sonambulismo son más comunes en personas con trauma, especialmente en aquellas a quienes se les ha diagnosticado con trastorno de estrés postraumático.
Las pesadillas y los terrores nocturnos también son frecuentes, junto con las conversaciones para dormir y los sudores nocturnos.
Para las personas con antecedentes de trauma que desarrollan trastornos del sueño, estos cambios neuroquímicos son evidentes en la amígdala, el área del cerebro que libera las hormonas del estrés adrenalina y cortisol.
Ideas de suicidio
Diversos estudios han encontrado una relación causal entre la exposición al trauma y el suicidio. Además, la teoría psicológica interpersonal de la conducta suicida presentada por el profesor de psicología Thomas Joiner indica que los individuos con trauma pueden ser más propensos a suicidarse que la población general.
