Tanto el campeón de la Conferencia Oeste como el del Este tienen una cita con la historia, ya que ambos, en caso de ganar, romperían el empate que tienen con Bulls y Lakers.
Tras ocho meses de temporada, la NBA está lista para conocer a su nuevo monarca. Golden State Warriors y Boston Celtics serán los encargados de definir al campeón del icónico año 75 de la liga estadounidense baloncesto. Tanto el campeón de la Conferencia Oeste como el del Este tienen una cita con la historia, ya que ambos, en caso de ganar, romperían el empate que tienen con Bulls y Lakers como el tercero y primero máximos ganadores en la historia de la NBA, respectivamente.
Si bien la experiencia está totalmente volcada a favor de Golden State, con un núcleo de jugadores que ya saben lo que es levantar el Larry O’Brien en múltiples ocasiones, eso no puede ser determinante ante unos Celtics que en su camino a las Finales dejaron fuera a los tres máximos favoritos del Este.
Ni las súper estrellas de los Nets (Kevin Durant y Kyrie Irvings), ni el campeón defensor (Bucks) y ni el líder del sector (Heat) pudieron acabar con los sueños de Boston. Ime Udoka está en su primer año como coach, y en su roster no cuenta con ningún elemento que ya sepa lo que es ser campeón en la NBA.
