Lamenta que en la sociedad aún exista la marginación, discriminación y abandono.
Es vicepresidenta de la Red Nacional de Ciegos y directora del Departamento del Adulto Mayor y Personas con Discapacidad en la Administración de Monclova.
Vicky González como la llaman, dijo que, a los 40 años quedó ciega. Lamenta que en la sociedad aún exista la marginación, discriminación y abandono. Periódico El Tiempo charló con ella.
La actual administración lleva apenas 20 días. ¿Qué tan difícil es para una persona invidente atender el departamento del adulto mayores y personas discapacitadas?
“No es difícil. Al contrario, primero tenemos que tener empatía con personas discapacitadas y adultos mayores y ello se debe a la experiencia que he adquirido desde la pasada administración”.
Vemos que recibe muchas personas. ¿Dónde adquirió la experiencia?
“El puesto lo acabo de obtener como directora. Antes estaba como asistente administrativo. No tenía cargo. Era un servidor público a lo mejor de muy bajo nivel, pero con muchas ganas”.
Hoy en día es mucha la necesidad de las personas discapacitadas e invidentes. ¿Cómo les responde usted?
“El tema aquí es cubrir sus necesidades, sus carencias con dignidad porque aquí se trabaja mucho el tema de la dignidad y el respeto hacia las personas. Es nuestra identificación como departamento”.
Es invidente. Tiene usted un puesto público muy dinámico. ¿A los cuántos años quedó ciega?
“A los 40. Ya traía el antecedente genético pero lo que disparó mi glaucoma fue algo muy agresivo porque tome un medicamento sin prescripción médica”.
Escuché que usted trabajó en Estados Unidos. ¿Qué hacía allá tan lejos, fue con familia o cómo vivió?
“Laboré en varios lugares entre el 2000 y 2004. En un hotel en el área práctica donde poníamos la comida para llevar. La decoraba muy bonita en cajas y canastas que para el cliente. Colocarla en canastas, y cajas que se viera atractiva para el cliente. Eso hacía”.
La sociedad pensaría que es difícil para una persona ciega convivir. ¿Con cuánta gente usted interactúa o convive?
“Estoy en la Red Nacional de Ciegos, soy vicepresidenta. Convivo aquí con los que visitan el departamento y otros más que me llaman por teléfono, alguna orientación porque tengo un grupo de amigos”.
En una Red Nacional de Ciegos debe tener cientos de contactos. ¿Qué función realiza y desde cuándo?
“A un año que tiene Coahuila de ser miembro de la Red Nacional de Ciegos vamos empezar a trabajar en una bolsa de trabajo virtual o una cooperativa donde los compañeros van a poder exponer sus habilidades o talento en la elaboración de productos, ofrecer un servicio”.
A estas alturas donde existen los derechos humanos y la equidad de género. ¿Cree usted que les ponen atención a las personas discapacitadas en México y Coahuila?
“Eso es lo que quisiéramos. Desgraciadamente la sociedad a veces seguimos encontrando casos de marginación, discriminación y abandono. Porque ignoran a las personas, no las incluyen en la vida diaria de la sociedad, es una tarea difícil”.
Usted es vicepresidenta de la Red Nacional de Ciegos. ¿Cómo perciben esa marginación o que hacen para acabarla poco a poco?
“Con la red nos hemos dado cuenta que existen muchas personas escondidas en sus hogares. El núcleo de la sociedad es la familia. Si la familia no hace por involucrar a sus hijos en las actividades que vayan encaminadas a un desarrollo pleno integral. Imagínese el resto de la sociedad”.
Usted presentó un plan de trabajo al señor alcalde. ¿Por qué cree que le hayan asignado tan importante encomienda?
“El alcalde me dio la oportunidad precisamente porque tramos un trabajo de respaldo, de constancia, perseverancia porque soy muy terca. Soy idealista, soñadora y muy honesta”.
Usted de seguro camina por las calles de la ciudad. ¿Cómo se comporta la gente?
“Hay personas que se hacen a un lado de nosotros como si la discapacidad se pegara. A la sociedad civil y a los servidores públicos decirles que no juzguen".
