Las autoproclamadas repúblicas separatistas de Lugansk (RPL) y Donetsk han ordenado la evacuación masiva de civiles a territorio ruso.
Viena.- La Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) ha expresado su "profunda preocupación" por el "importante aumento de la violencia armada en el este de Ucrania", registrado por la misión de observadores internacionales sobre el terreno (SMM).
En una declaración conjunta publicada la pasada noche, el presidente de turno de la OSCE y ministro polaco de Exteriores de Polonia, Zbigniew Rau, y la secretaria general de la organización, Helga Maria Schmid, instaron a las partes a "abstenerse del uso de la fuerza y a desescalar una situación ya tensa".
Según el último informe de la SMM, difundido a última hora del viernes, las violaciones del alto el fuego a lo largo de la línea de contacto en el Donbás (este de Ucrania), donde las fuerzas gubernamentales ucranianas luchan contra los separatistas prorrusos, han seguido aumentando de forma masiva.
Solo el viernes se registraron 800 violaciones al alto el fuego, más del triple de la media de casos reportados en los 30 días previos.
De esos actos violentos, 654 fueron explosiones, cuando el promedio diario se situó el pasado mes en menos de 100.
Concretamente, el documento reporta 648 violaciones al alto el fuego en Lugansk (de ellas, 519 fueron explosiones) y 222 en Donetsk (135 explosiones).
Con respecto al bombardeo el pasado jueves de un jardín de infancia en la localidad de Stanitsa Luhanska, la SMM hizo una evaluación sobre el terreno aunque solo pudo efectuarla a cierta distancia porque "un oficial de las fuerzas del orden no permitió a la misión acceder al lugar alegando una investigación en curso".
Los observadores internacionales pudieron percatarse de "un cráter en el patio de recreo" de la institución, indica el informe.
Además, entre otros daños, como varias ventanas rotas, vieron "marcas consideradas como causadas por metralla en la parte interior de un muro de hormigón que rodea el edificio".
Según la información de la que dispone la OSCE, no hubo heridos entre los 20 niños que había en la guardería en el momento del ataque.
En su declaración conjunta, Rau y Schmid arremeten también contra una retórica "incendiaria" de las partes en conflicto."La retórica cada vez más hostil e incendiaria que hemos escuchado recientemente socava los esfuerzos para fomentar la paz, la estabilidad y la seguridad y aumenta los riesgos de una mayor confrontación y escalada, debe cesar", señalan.
Asimismo, lamentan "la difusión de desinformación sobre una acción militar inminente por parte de las fuerzas gubernamentales ucranianas; esto afecta críticamente a la población civil en la zona de conflicto".
Las autoproclamadas repúblicas separatistas de Lugansk (RPL) y Donetsk han ordenado la evacuación masiva de civiles a territorio ruso, ante el temor de un ataque del Ejército ucraniano, a pesar de que éste ha negado tener planes de atacar.
