La agenda incluye cinco puntos principales, entre ellos la revisión de las principales políticas estatales de 2022, un plan de trabajo para 2023, la implementación del presupuesto de este año
Seúl. - Los medios estatales norcoreanos anunciaron este martes el inicio de un importante plenario del Partido de los Trabajadores, en cuya primera sesión participó el líder Kim Jong-un y en el que se prevé que se trace la política exterior y económica del régimen para el próximo año.
Según publicó hoy la agencia estatal de noticias KCNA, la sexta reunión plenaria del octavo comité central del Partido de los Trabajadores fue celebrada en la víspera para debatir sobre las metas para 2023 en un momento de "dificultades impredecibles que amenazan constantemente la existencia y el desarrollo" del país.
"Esta reunión se produce en un momento histórico en el que todo el Partido, todo el país y todo el pueblo se comprometen a hacer una lucha vigorosa en el nuevo año 2023", recogió el comunicado de KCNA.
La agenda incluye cinco puntos principales, entre ellos la revisión de las principales políticas estatales de 2022, un plan de trabajo para 2023, la implementación del presupuesto de este año y el proyecto del mismo para el año que viene.
Con respecto al primer punto, el propio Kim Jong-un se refirió al los "éxitos y avances" de su país mediante una "ardua y feroz lucha sin precedentes de este año".
El líder norcoreano aclaró los principales objetivos que deben alcanzarse en 2023 en sectores productivos clave de la economía del país, como el de las industrias metalúrgica, química, de energía eléctrica, del carbón y de maquinaria, y en otros campos de la economía nacional, como la construcción y la agricultura.
El arranque del plenario se produce después de que este lunes varios drones norcoreanos cruzaran la frontera con el Sur y obligaron a desplegar aviones de combate y helicópteros para destruirlos, según el Ejército surcoreano, que envió a su vez drones al Norte para realizar operaciones de reconocimiento.
El envío de estos drones y el arranque de la reunión del partido único coinciden con un momento de máxima tensión en la península coreana ante el número récord de pruebas de armas que Pionyang ha realizado este año y las maniobras militares conjuntas con las que Seúl y Washington están respondiendo.
