Rafael Nadal tuvo que apelar a su fortaleza mental para mantenerse con vida en el Abierto de Australia 2022.
El tenista español, de 35 años, padeció problemas estomacales en la segunda mitad de una batalla que terminó ganando en cinco largos sets con parciales de 6-3, 6-4, 4-6, 3-6 y 6-3 sobre el canadiense Denis Shapovalov tras poco más de cuatro horas de juego en la Rod Laver Arena.
Al número cinco del mundo se le complicó un partido que parecía tener controlado y encamino a ganarlo en sets corridos, pero nada más alejado de ello. Shapovalov empezó a jugarle al revés y Rafa empezó a dejar dudas con su servicio. Así perdió su saque en el décimo ‘game’ del tercer episodio y a partid de ahí el canadiense tomó el control de las acciones.
Pero nunca se puede dar por muerto a Nadal. Cuando la derrota se asomaba en su camino, sacó toda su experiencia sobre la Rod Laver Arena para quebrarle el saque el miembro de la NextGen y posteriormente se dedicó a mantener su servicio para avanzar a las semifinales.
“La verdad es que no sé cómo lo hice, tuve mucha suerte al inicio del quinto, para mí es increíble estar en semifinales”, dijo Nadal al terminar el encuentro.
