Cada cuatro años un equipo nace de la nada para robarse todos los reflectores, el llamado ‘caballo negro’ y en Medio Oriente no fue la excepción, la Selección de Marruecos dejó en el camino contra todo prónostico a potencias de la talla de Portugal, España y Bélgica, a base de buen fútbol, lejos de suerte o casualidad.
Antes de la hazaña conseguida por la escuadra de Walid Regragui de conseguir el boleto a semifinales tras derrotar a Portugal lo más lejos que un equipo africano había llegado en una Copa del Mundo fue a Cuartos de Final; Camerún lo consiguió en Italia 1990, Senegal en Corea-Japón 2022 y Ghana en Sudáfrica 2010, tuvieron que pasar doce años para que el ‘continente negro’ se pusiera dentro de los cuatro mejores del mundo.
La historia de Marruecos en el Mundial es corta, debutaron en México 1970, desde entonces suman seis participaciones, de las cuales en cuatro se quedaron en fase de grupos, lo más lejos que habían llegado fue a Octavos de Final en México 1986 en donde cayeron ante Alemania, pero esos tiempos en los eran las ‘víctimas’ dentro de las cancha se terminaron y llegaron a Medio Oriente para darle un giro importante a su historia, clasificando por primera vez a la antesala de la gran final después de eliminar a Portugal en Cuartos de Final y a España desde los once pasos en Octavos de Final.
Los números de los ‘Leones del Atlas’ en Qatar son contundentes, en los cinco partidos que han jugado registran hasta el momento un empate ante Croacia, por cuatro victorias, una en tanda de penales ante España en Octavos de Final, la más reciente sobre Portugal en Cuartos, las otras dos fueron en Fase de Grupos ante Bélgica y Canadá, cabe resaltar, que de todos los encuentros y ante dichas potencias únicamente tienen un tanto en contra, situación que refleja la solvencia de Yassine Bounou en la portería.
La Selección Marroquí esta compuesta por un grupo de futbolistas que han sido resultado de la migración, la mayoría cuenta con la doble nacionalidad, por ejemplo, Bounou, el héroe bajo los tres palos, nació en Canadá, el delantero Achraf Hakimi pudo vestir la playera de España, sin embargo, no se sintió cómodo con una nación que no representaba sus creencias y tradiciones, incluso su entrenador, Walid Regragui, franco-marroquí se decantó por el país de sus padres, lejos de cualquier potencia, prefirió sus raíces.
Las raíces de Marruecos
- Yassine Bounou | Canadá / Marruecos
- Noussair Mazraoui | Países Bajos / Marruecos
- Romain Saïss | Francia / Marruecos
- Nayef Aguerd | Marruecos
- Achraf Hakimi | España / Marruecos
- Azzedine Ounahi | Marruecos
- Sofyan Amrabat | Países Bajos / Marruecos
- Selim Amallah | Bélgica / Marruecos
- Hakim Ziyech | Países Bajos / Marruecos
- Youssef En-Nesyri | Marruecos
- Sofiane Boufal | Francia / Marruecos
- Abdelhamid Sabiri | Alemania / Marruecos
Marruecos continúa sorprendiendo al mundo, sus futbolistas han crecido profesionalmente en las mejores ligas del planeta, la Premier League de Inglaterra, la Liga Española, la Serie A de Italia y la Bundesliga de Alemania, lo que deja claro que no son ningunos amateurs, saben lo que es competir en la élite, ante los mejores, Walid Regragui en tres meses formó un grupo de jugadores con hambre, mentalidad y talento, combinación letal para las ‘potencias’ que los han enfrentado.
