La intervención de Macron se enmarca en la conmemoración del 60 aniversario del final de la guerra en ese país.
París.- El presidente de Francia, Emmanuel Macron, tuvo hoy un gesto simbólico hacia los "pieds-noirs", franceses establecidos en Argelia en el periodo colonial, al calificar de "imperdonable" un tiroteo en Argel en 1962 y subrayar que debe ser "reconocida" otra masacre el 5 de julio de ese año en Orán.
El tiroteo en la calle de Isly de la capital argelina se produjo el 26 de marzo 1962 y marcó el inicio del éxodo masivo de los "pieds-noirs", obligados a abandonar Argelia con la independencia del país ese año.
Decenas de partidarios de la Argelia francesa fueron abatidos ese día por el Ejército galo en apenas un cuarto de hora."Es hora de decirlo, lo que debía ser una operación de mantenimiento del orden acabó en una masacre, una masacre que provocó decenas de muertes y centenares de heridos y de la que no se ha establecido ninguna lista definitiva de víctimas", dijo Macron en un encuentro con asociaciones de "pieds-noirs".
Lo sucedido es "imperdonable para la República" y todos los archivos franceses que contienen información "podrán ser consultados y estudiados libremente", añadió.
El presidente se refirió también a otra tragedia, el 5 de julio de 1962 en Orán, en la que "centenares de europeos, principalmente franceses, fueron masacrados". "Esa masacre también debe ser mirada de frente y reconocida", estimó.
Este último suceso, atribuido al Ejército de Liberación Nacional, se produjo apenas horas antes de la proclamación oficial de la independencia de Argelia.
La intervención de Macron se enmarca en la conmemoración del 60 aniversario del final de la guerra en ese país, el 19 de marzo de 1962.
En septiembre de 2021, el presidente ya había pedido perdón a los harkis, los argelinos integrados en las tropas francesas que lucharon contra los independentistas en ese conflicto.
Estos antiguos combatientes, unos 200,000 hombres, fueron reclutados como auxiliares por el Ejército francés durante la guerra, de 1954 a 1962, pero al final fueron abandonados por París y víctimas de represalias en Argelia.
En esa misma intervención de septiembre Macron avanzó un proyecto de ley que dejaba constancia de ese perdón y reconocimiento y que está siendo examinado actualmente en el Parlamento con la intención de que sea adoptado antes de finales de febrero."Un discurso no arregla sesenta años de injusticias y las palabras a veces son poca cosa, pero quería que hoy algunas palabras reconocieran esos dramas sobre los que la República nunca se había expresado", concluyó este miércoles el jefe de Estado.
