Los simpatizantes de Morena, muchos de ellos trasladados en autobuses urbanos o de organizaciones que acudieron a votar para la elección de setenta consejeros, la mitad eran mujeres, entregaron copias de su credencial para votar y un formato de inscripción.
En las sedes de los siete distritos electorales, donde se instalaron las mesas receptoras, el panorama fue similar, en decenas de camiones contratados se llevó a personas de ambos sexos, en su mayoría adultos mayores a votar y los retornaron a sus lugares de origen.
La instalación de la casilla, ubicada en la plazuela "Obregón", a un costado de catedral, en el centro de Culiacán, tuvo problemas para abrir a la hora fijada, lo que generó molestia y un desorden, por el gran número de personas que desde muy temprano acudieron a ocupar los primeros lugares para emitir su voto para elegir a los setenta consejeros del Movimiento de Regeneración Nacional.
En la casilla, ubicada en el parque Hernando de Villafañe, en el municipio de Guasave. Correspondiente al Cuarto Distrito Electoral, se apreció que cientos de personas fueron trasladadas desde sus comunidades rurales, en camiones, con los logotipos de la alianza de transportistas afiliados a la central campesina CNC.
Las quejas entre morenistas, en la mesa receptora ubicada en la plazuela de Urías, en Mazatlán, correspondiente al primer distrito, activistas afines al presidente municipal promovieron la emisión del sufragio en favor de sus allegados.
En uno de los tres módulos instaladas en Culiacán, en el Jardín Botánico, frente a Ciudad Universitaria, con más de media hora de anticipación a su apertura, se organizó una larga fila de casi seiscientas personas que fueron las primeras en llegar, en vehículos particulares y algunas en pequeños camiones de transporte de personal.
Con siete minutos de retraso, abrió esta casilla, en la que el personal encargado de la organización con chalecos morados, con logotipos de Morena, dieron prioridad para emitir su voto, a las personas de la tercera edad, en silla de ruedas o mujeres embarazadas, sin que se levantaran protestas.
Se pudo observar, como personas de todas edades, muchas de ellas con niñas, provenientes de sindicaturas cercanas a Culiacán, fueron trasladadas desde sus comunidades para que acudieran a votar, en lo que se le denomino un ejercicio democrático.
En la zona de estacionamiento del Jardín, jóvenes de ambos sexos, con libretas en mano, checaban el arribo de las personas a las que les preguntaban sobre su procedencia, muchas de ellas, revelaron que, durante la semana, les hablaron por teléfono a sus casas para encuestarlos sobre sus inclinaciones para votar.
