SAO PAOLO, 16 mar.
Tras una exitosa gira por Europa y Estados Unidos, la fiebre por las experiencias sensoriales e inmersivas aterrizan ahora en Brasil a través de una exposición que ofrece un viaje por las obras del pintor posimpresionista Vincent Van Gogh.
Montada en un área de más de 2.000 metros cuadrados, la exposición "Beyond Van Gogh" abrirá sus puertas este jueves para el público con una invitación para "sentir" más de 300 obras del genio neerlandés, gracias a un espectáculo sensorial y digital que combina una diversidad de luces, artes, colores, músicas y formas.
"Es una nueva forma de experimentar el arte y la cultura que nunca antes se había vivido", pues "toda esa tecnología genera esa sensación de emoción y sentimientos. Hay mucha sensibilidad", afirmó en una rueda de prensa este miércoles el productor cultural Andrés Naftali.
Pese a una corta carrera y vida, Van Gogh (1853-1890) inmortalizó en sus coloridos lienzos el sinfín de tropiezos y desilusiones que marcaron su trayectoria, que, aunque tardíamente, lo convertirían en uno de los principales referentes del posimpresionismo en el mundo.
Ahora, los espectadores tienen la oportunidad de adentrar su mundo mágico y escrutar obras como "Los comedores de patatas", "Los girasoles", "Terraza de café por la noche", "La habitación de Vincent en Arles" o "La casa amarilla", entre muchas otras.
Asimismo, pueden sumergirse en "La noche estrellada" y entrever un poquito de lo que un día fue la vista desde la ventana de la habitación del pintor durante su estancia en un asilo en Saint-Rémy-de-Provence, en Francia, donde se ingresó voluntariamente tras un brote psicótico y produjo algunas de las obras más conocidas de su carrera.
Inmersos en las imágenes cambiantes que llenan el salón, siempre conducidas por una banda sonora y espectáculos musicales y teatrales en vivo, los visitantes también acompañan como el humo abandona la pipa plasmada en los cuadros o son testigos de las miradas curiosas del pintor holandés eternizado en sus autorretratos.
En un parpadeo, el hasta entonces inmenso campo de girasoles se convierte en un acogedor café de una bucólica villa francesa. Otro destello más y un apacible paraje de los Países Bajos da lugar a una noche repleta de brillantes estrellas en el cielo.
Segundos después, casi que instantáneamente, la luz se transforma, los colores cambian y las figuras cobran otras formas, en un ciclo que se repite cada 35 minutos.
"Beyond Van Gogh", que se extenderá hasta el próximo 3 de julio en el centro comercial Morumbi de Sao Paulo, aterriza en Brasil tras una prestigiosa gira por diversas ciudades de Europa y Estados Unidos, y promete consolidarse como todo un éxito también en Latinoamérica, pues también recorrerá otros países de la región.
