El Consejo de Ministros luso aprobó esta semana una resolución para agilizar la protección temporal de los refugiados ucranianos en el país.
Lisboa.- Los lusos y ucranianos residentes en Portugal mantienen las cadenas de solidaridad creadas desde que comenzó la invasión rusa en una jornada en la que no han cesado las peticiones de que acabe la guerra y la ayuda a los refugiados.
En la ciudad de Évora, en el centro del país, este domingo se han reunido cerca de 300 personas en una marcha por la paz, donde ha sonado el himno ucraniano en apoyo a los afectados por el conflicto y donde se han podido ver carteles con mensajes de "Que pare la guerra" y "Parad a Putin".
Ha habido una concentración similar en Faro, convocada por la Asociación de Ucranianos de Algarve, región del sur a la que ya han llegado decenas de refugiados provenientes de Ucrania, la mayoría de ellos con familiares residentes en Portugal, según recogieron medios locales.
Durante el fin de semana también han llegado decenas de refugiados al país a través de diferentes vuelos a la capital, donde les han recibido familiares y conocidos, así como una treintena de voluntarios del Servicio de Extranjeros y Fronteras (SEF).
En paralelo, las diferentes iniciativas de recogida de alimentos, ropa, medicamentos y dinero continúan recaudando bienes para enviarlos a la frontera con Ucrania o para atender a los que lleguen a Portugal, y son varios los municipios que se han movilizado para ofrecer puestos de trabajo a los refugiados.
También se han pronunciado asociaciones de abogados y médicos, que ofrecen asistencia a los que lo necesiten.
En una misa organizada hoy en la capital lusa para la comunidad ucraniana, el cardenal patriarca de Lisboa, Manuel Clemente, ha asegurado a los presentes que "Lisboa es vuestra tierra" y, minutos más tarde, en declaraciones a los periodistas, ha pedido que "la parte militar acabe" para continuar con el diálogo.
La embajadora de Ucrania en Portugal, Inna Ohnivets, también presente en el acto religioso, ha recalcado a la prensa la importancia de "comenzar las negociaciones diplomáticas entre Rusia y Ucrania para preservar la seguridad" de su país, que "todavía es posible" la vía diplomática y ha expresado su gratitud a los portugueses.
El Consejo de Ministros luso aprobó esta semana una resolución para agilizar la protección temporal de los refugiados ucranianos en el país y por la que se simplifican los procesos burocráticos para acceder a servicios de salud, fiscales y de empleo.
A lo largo de estos 11 días de guerra, más de 1.5 millones de ucranianos han abandonado el país para huir de la invasión rusa, según cifras de la ONU.
