La cadena de comida rápida confesó que su intención es dejar de operar en Rusia; sin embargo, lo detiene un ‘proceso legal complicado’.
La cadena de comida rápida Burger King confesó que su intención es dejar de operar en Rusia en respuesta a la invasión a Ucrania; sin embargo, le ha resultado difícil porque uno de sus socios se ha “negado” a cerrarlos.
De acuerdo con información de CNN, Burger King busca suspender la operación de 800 restaurantes, pero la cadena de hamburguesas, propiedad de Restaurant Brands International (RBI), tiene una sociedad con el empresario Alexander Kolobov en Rusia.
RBI controla el 15 por ciento del negocio de Burger King en Rusia y Kolobov es responsable de las “operaciones diarias y la supervisión” de sus locales en el país, explicó el medio estadounidense.
Por este motivo, la compañía no ha podido cancelar sus operaciones.
David Shear, presidente de las operaciones internacionales de RBI, admitió que la empresa ya inició un proceso para deshacerse de su participación con dicho empresario, aunque el proceso “llevará algún tiempo”.
“Aunque nos gustaría hacerlo inmediatamente, está claro que nos llevará algún tiempo hacerlo con base a los términos de nuestro acuerdo de empresa conjunta existente”, refirió.
Su principal competidor, McDonald’s, anunció hace unas semanas que cerraría sus restaurantes hasta nuevo aviso.
