Expertos en salud pública han criticado al Gobierno de Biden por no actuar más rápido para abordar la crisis.
El Gobierno de Estados Unidos ha declarado como emergencia de salud pública a la viruela del mono este jueves, mientras los casos aumentan diariamente en Estados Unidos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya había declarado la emergencia a nivel internacional el pasado 23 de julio.
Esta medida permitirá acceder a fondos y recursos para dar respuestas al brote.
Durante la sesión informativa del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) se dio a conocer la información en medio de críticas por el manejo del brote pues, esperó más de tres semanas después del primer caso confirmado en Estados Unidos para ordenar que las existencias al por mayor de la vacuna contra la viruela del mono ––que el Gobierno posee y almacena en Dinamarca–– se embotellaran y enviaran al país para su distribución.
"Estamos preparados para llevar nuestra respuesta al siguiente nivel", explicó este jueves el secretario de Salud de Estados Unidos, Xavier Becerra, en una llamada con periodistas.
SÍNTOMAS
Los más frecuentes son pústulas, fiebre, inflamación de los ganglios, dificultad para respirar, dolor de cabeza y dolor muscular.
Se transmite por una interacción muy estrecha entre personas directamente o a través de objetos contaminados y, normalmente, la enfermedad es leve. Un pequeño porcentaje de contagiados requiere hospitalización, pero los casos más graves pueden llegar a provocar la muerte en personas con comorbilidades.
