Jan Polanc. Terminada la bajada le tomó el relevo otro hombre del UAE, el colombiano Andrés Ardila, capaz de abrir un trecho de 150 metros.
Redacción deportes,- El británico Ethan Hayter (Ineos) se impuso en la segunda etapa de la Semana Coppi e Bartali, disputada entre Riccione y Longiano, de 165,9 km, en la que su compañero irlandés Eddie Dunbar dio un paso al frente de la general.
Hayter, londinense de 23 años, solvente en contrarreloj, como demostró su octava plaza en el pasado Mundial de la especialidad, certificó con su primera victoria de la temporada el trabajo de todo el Ineos, que buscó el doble premio de etapa y liderato todo el día, sobre todo desde que el primer líder de la prueba, el suizo Mauro Schmid, sacó la bandera blanca lejos de meta.
No terminó ahí la fiesta del Ineos, ya que la tercera plaza se la apuntó otro joven británico, Ben Tulett, de 20 años. Una revolución en la que se coló como segundo clasificado el italiano Matteo Sobrero (BikeExchange). Fue el resultado de una llegada que disputaron un grupo de 15 corredores que se juntaron en el último tramo después de innumerables ataques.
Dentro del grupo principal entró el irlandés Eddie Dunbar, segundo clasificado en la primera jornada, por lo que logró ponerse de líder con una ventaja de 6 segundos sobre Hayter y 14 respecto a Matteo Sobrero.
Una jornada rompepiernas con 15 subidas, sin apenas respiro, sobre todo en el circuito en el que había que ascender cinco veces el Roncofreddo (3a, 5,4 km al 4,2 por ciento) y el Bivio Monteleone (3a, 7km al 3,5).
Cerca de la última vuelta, a 22 km de meta, el pelotón se redujo a 38 corredores, algunos con ganas de dar batalla para evitar una llegada numerosa a Longiano. Lo probó el húngaro Erik Fetter (EOLO-Kometa), abriendo una pequeña distancia que obligó a subir el ritmo de los perseguidores.
Ese tirón los acusaron dos nombres ilustres, Geraint Thomas (Ineos), enfrascado en trabajo de gregario, y Mathieu van der Poel (Alpecin-Fenix), ambos sufriendo a cola de furgón.
En un descenso ensayó el despegue otro esloveno que se quiere apuntar a la moda triunfal de sus compatriotas, Jan Polanc. Terminada la bajada le tomó el relevo otro hombre del UAE, el colombiano Andrés Ardila, capaz de abrir un trecho de 150 metros.
La maniobra fue tomada en serio. El Ineos desplegó su poderío para reducir las ínfulas de Ardila, quien fue atrapado en poco tiempo, a menos de 2 km de meta. Al último repecho, el Muro de Belvedere, de 800 metros al 11 por ciento, llegaron los más fuertes. Entre todos, el mejor fue Ethan Hayter.
Un ciclista que procede de la pista, donde ha logrado dos títulos mundiales, y que presentó credenciales en ruta en la temporada pasada, con 9 triunfos, entre ellos una etapa en la Semana Coppi e Bartali, dos en la Vuelta a Andalucía y la general de la Vuelta a Noruega, entre otros laureles.
La fiesta quedó en la casa del Ineos. Dunbar partirá con el maillot de líder este jueves en la tercera etapa, que presenta un recorrido de 163 km con salida y llegada a San Marino, un trayecto exigente de montaña con un total de 12 ascensos y final en alto en la capital del estado soberano más antiguo del mundo tras un ascenso de 10 km al 5,7 por ciento de pendiente media.
Esa subida se afrontará en 5 ocasiones dentro del circuito que abarca la segunda mitad de la jornada. Al inicio de la misma, como aperitivo, el Alto Serra San Marco (1a,12 km al 4,3).
