Las blaugranas ganaron, gustaron y golearon a su clásico rival merengue.
El Barcelona no dejó lugar a la duda y volvió a ratificar su condición de dueño y señor de la Liga F y del 'nuevo clásico' al imponerse al Real Madrid de forma rotunda y contundente por 0-4 en el Alfredo di Stéfano.
Cuando parecía que el conjunto de Alberto Toril podía haber acortado las distancias, las jugadoras de Jonatan Giráldez se empeñaron en contradecir esta sensación y desde el pitazo inicial manejaron el encuentro con solvencia y autoridad. Misa Rodríguez incluso evitó un marcador más amplio.
Pese a las ausencias de jugadoras importantes en el once barcelonista hubo bastante diferencia sobre el césped, fraguada desde la intensa presión en la salida del balón, en el control del juego y en la velocidad en ataque con la brasileña Geyse Ferreira y la suiza Ana-Maria Crnogorcevic. El vigente campeón, que ha ganado todos sus partidos, mandó en todos los conceptos.
La superioridad azulgrana quedó reflejada en su máxima expresión en los diez primeros minutos. El Barcelona tuvo cuatro ocasiones claras para batir a Misa a parte del gol de Crnogorcevic (4') al peinar un centro de Patri Guijarro, que reinó en la medular y se encargó de ampliar la ventaja justo antes del descanso (43') tras un saque de esquina.
Aunque el equipo de Toril paulatinamente había empezado a enlazar juego y a creer que podía, apenas dio señales de vida ante la meta de Sandra Paños salvo en un remate flojo de Esther González. El tanto de Patri fue letal y junto al de Aitana Bonmatí al inicio del segundo periodo (52') liquidaron el partido.
Quisieron sacar el orgullo las jugadoras del equipo blanco, Claudia Zornoza envió un balón al palo (58'), pero el Barcelona no le permitió más alegrías de las debidas. Al contrario, las azulgranas dispusieron de varias oportunidades claras que encumbraron otro partido más a Misa. No pudo evitar la primera derrota liguera de la temporada del Real Madrid pero sí un marcador mucho más abultado. La guinda la puso de rebote la sueca Fridolina Rolfo tras otra gran intervención de la portera canaria.
