Los cuerpos estaban dentro del vehículo particular del funcionario municipal
Michoacán.- El director de Seguridad Pública del municipio de Ocampo, Michoacán, José Luis García Pompa, fue privado de su libertad la noche de ayer, por un grupo armado, presuntamente del Cártel Jalisco Nueva Generación y hasta el momento sigue desaparecido.
El informe homologado refiere que varios sujetos armados irrumpieron en el domicilio del mando policial, en la comunidad de San Cristóbal, y lo subieron a un vehículo.
En su huida, el comando fue interceptado por integrantes de una célula criminal de sus antagónicos, Los Correa, lo que derivó en un enfrentamiento.
El reporte infiere que Los Correa intentaban rescatar a García Pompa, de quien hay indicios que trabajaba para esa organización criminal, pero no lo consiguieron.
Hasta este momento, no se reporta el hallazgo de personas muertas tras el choque a tiros entre ambos cárteles antagónicos, ni la aparición del mando policial.
El pasado 28 de septiembre, Omar Daniel Colín Alanís, secretario del ayuntamiento de Ocampo, y su padre, Juan Colín Vanegas, fueron asesinados a tiros en la comunidad de Ziráhuato, del municipio aledaño de Zitácuaro.
Los cuerpos estaban dentro del vehículo particular del funcionario municipal, el cual presentaba varios disparos de proyectil de arma de fuego.
En la escena del crimen, las autoridades encontraron evidencias donde se adjudica el crimen, el jefe de plaza del CJNG, William Edwin Rivera Padilla, "El Barbas", "El Águila" y/o "El X".
Informes de las áreas de inteligencia, refieren que Omar Daniel Colín, ya había sido contactado y amenazado por El Barbas, para que accediera a pagar “cuotas”.
Además, para exigirle al funcionario que actuara a su favor y empezar a apoderarse de los aserraderos y de la tala de árboles en los bosques de Ocampo.
Los reportes señalan que incluso "El Barbas" había citado en varias ocasiones a Colín Alanís, en el municipio de Zinapécuaro, para presionarlo.
Las autoridades consultadas refieren que a pesar de ello, Omar Daniel Colín no presentó denuncia, ni solicitó escoltas, por temor a ser asesinado por el CJNG.
