Los cambios en nuestras costumbres y rutinas suelen ayudarnos con los síntomas como la irritabilidad, la fatiga y el nerviosismo.
En la vida cotidiana hay momentos de preocupación y no suele pasar desapercibido especialmente para nuestro cerebro, el estrés es una respuesta del organismo con situaciones que presentan peligro y angustia, todos naturalmente experimentamos la sensación de diferente manera dependiendo de las circunstancias.
El estrés se origina en nuestro cuerpo, incluso las manifestaciones más intensas siendo este un cuadro crónico, los síntomas de irritabilidad y cansancio son imprescindibles, por lo tanto, hay que buscar promover rutinas para controlar las sensaciones que pueden llegar a ser agobiantes.
- Ejercicio: la actividad física como correr, nadar, caminar, Pilates o yoga es la manera natural de poder descargar y regular la tensión que se acumula durante la rutina diaria. Ejercitamos nuestro cuerpo para que nuestro organismo produzca endorfinas y serotonina, estos ayudan a regular el estado de ánimo, por lo tanto, nos hace sentir bien. Al mismo tiempo estamos enviando más sangre oxigenada a nuestro cerebro.
- Descanso: dormir es el proceso el cual nuestro cuerpo recupera energía y elimina lo que no necesitamos durante el día, aunque muchas veces pensamos que el sueño es un momento secundario, solo nos vamos a dormir cuando hemos terminado nuestros compromisos y solo por pocas horas si es necesario, aunque esto no colabora con el estrés. Lo más recomendable seria priorizar un descanso similar a otras actividades, una experta recomienda organizar el día y los horarios para ir a dormir y despertar a la misma hora formando así una rutina, lo más recomendable son siete u ocho horas de descanso.
- Alimentación: es esencial moderar los alimentos que contienen hidratos de carbono como el arroz, el pan, las pastas y las papas, entre muchos otros. También es recomendable reducir el consumo de cafeína y alcohol estos pueden alterar el sistema nervioso, es más conveniente optar por alimentos que son antiinflamatorios ya sea verduras, frutas, pescado, frutos rojos, yogurt y grasas no saturadas.
- Suplementos naturales: suelen ser una alternativa sana para algunos síntomas como el nerviosismo y la fatiga, esto en una alta producción de cortisol la hormona del estrés. Si bien las hierbas y medicinas naturales son utilizadas de forma segura, es recomendable acudir con un médico antes de tomar cualquier suplemento.
- Terapia: ir y conversar con un profesional de psicología no está de más, esto nos ayuda a canalizar e identificar los malestares, es una estrategia para aliviar los sentimientos que el estrés u otras afectaciones nos provocan.
