El empeño se convirtió en el recurso más socorrido por los mexicanos para obtener efectivo de forma inmediata para cubrir sus necesidades.
La pandemia del coronavirus que trajo desempleo, quiebras de empresas, fallecimientos y gastos fúnebres y médicos inesperados impulsaron los ingresos de las empresas de préstamos prendarios.
Un estudio a nivel nacional de la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Prendarios (Amespre). Tuvo como resultado que, entre el 2020 y el 2021, las casas de empeño se convirtieron en el recurso más socorrido por los mexicanos para obtener efectivo de forma inmediata y solventar sus necesidades más apremiantes.
Para comprobar si ciudadanos monclovenses recurrieron a empeñar artículos personales en las casas de empeño para hacerle frente a la contingencia del COVID-19. Periódico El Tiempo abordó a personas el día 14 de enero en la plaza principal.
Economía. La mayoría de los encuestados coincidieron en que, “los bienes son para remediar los males”. Algunos pudieron recuperar sus prendas. Otros las perdieron.
En vista de la situación económica como se presenta por el COVID-19, es un hecho que la gente va a tener que recurrir nuevamente a empeñar sus cosas. No le queda de otra.
Afortunadamente yo soy pensionado y me he sabido administrar y no he llegado a tanto. Lo único que si tengo es un préstamo con Banamex, pero hasta ahí. En las casas de empeño abusan de las personas”. Comentó Fidencio Zavala Castillo, pensionado quien laboró por 30 años en Altos Hornos de México.
Encuesta. Gloria Hernández Martínez, ama de casa opinó que. “Ya una vez que empeñas tu celular o pantallas de televisión es más difícil hacerte de ellas. Da tristeza ver cómo anda la gente preocupada por tanto contagio. Yo no he llegado todavía a empeñar cosas, pero a como está la situación ya casi andamos en eso. Está la crisis de enero y también la pandemia lo que nos orilla a empeñar”. Señaló.
No está bien que empeñes aparatos, pero hay muchas personas que no tienen dinero ni trabajo y se ven orilladas a hacerlo. Como dicen que, “los bienes son para remediar los males”. Conozco a personas que empeñan celulares y pantallas, señaló Liliana Hernández, ama de casa.
Fallecimientos. Guadalupe Velázquez, comerciante de tacos y gringas señaló a El Tiempo. “La necesidad es mucha por la falta de trabajo y la situación de los contagios y fallecimientos. Muchos negocios cerraron y como dicen que, “los bienes son para remediar los males” las personas tienen que empeñar sus cosas para salir del apuro. Yo el año pasado empeñe dos pantallas y un celular, incluso hasta el de mi niño porque la crisis estuvo de la fregada”.
Millones. En 2019, previo a la pandemia las casas de empeño realizaron 61.1 millones de operaciones que ascendieron a 63 mil millones de pesos, con un promedio diario de 125 mil préstamos repartidos en 3 mil 500 sucursales a lo largo del país.
En México al menos ocho de cada diez personas recuperan sus pertenencias. A dos años de la pandemia las operaciones de casas de empeño se encuentran apenas 15 por ciento por debajo de los niveles prepandemia, con un estimado de 50 millones de operaciones en todo el 2021, de acuerdo con datos de Amespre.
Empeño. En un recorrido por Periódico El Tiempo, en tres casas de empeño con fachadas de color verde. En dos solo había unas cuantas bicicletas en exhibición.
Conforme avanzó la reactivación económica, los picos de operaciones se estabilizaron, pero el panorama ahora con la variante Ómicron es incierto.
El lunes 17 de enero la secretaría de Salud de Coahuila reportó 1,486 nuevos casos de COVID-19 incluidas 9 defunciones.
En el 2021 las casas de empeño acumularon en todo el país 431 quejas ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), una reducción del 22 por ciento contra el 2020 y 53.3 por ciento menos que en el 2019. (Amespre).
