Los eventos deportivos de nivel mundial que vienen a México han sido extremadamente costosos para los espectadores que desean gozar de algunos de ellos, principalmente el Abierto Mexicano de Tenis, que en su edición de 2023 estará celebrando su 30 aniversario.
Este certamen del deporte blanco es de categoría 500, por lo que no siempre su roster está plagado de los mejores tenistas del planeta. Claro que se ha hecho un gran esfuerzo por mejorarlo año tras año en la búsqueda de que algún día llegue a ser de clase 1000, los certámenes más importantes después de los Grand Slam de Australia, Roland Garros, Wimbledon y Estados Unidos.
Ahora, es increíble que el Abierto Mexicano de Tenis ponga sus boletos a precios tan elevados que no tienen competiciones de categoría 1000 y que se disputan en ciudades de primer mundo.
Para muestra de lo anterior compararemos al noveno y último Masters 1000 del año, París, contra el certamen mexicano en tierras acapulqueñas.
Asistir al AMT es un lujo, pues muy pocos mexicanos podrían desembolsar las cantidades que cuestan las entradas para ver una semana o tres días de tenis en Acapulco.
A eso, hay que sumarle hospedaje y traslados en caso de que no vivas en esa zona.
