Aunque algunos se preguntaron si este día realmente llegaría, Europa parece estar preparada para avanzar hacia un estándar común de carga USB-C.
Después de meses de deliberaciones y casi una década de especulaciones, el Consejo Europeo aprobó el lunes una directiva de cargador común. Esta directiva hará que los puertos USB-C sean obligatorios para teléfonos móviles, tabletas, auriculares, consolas y otros dispositivos electrónicos para el otoño de 2024. En teoría, la nueva directiva hará que USB-C sea el único cargador para gobernarlos a todos, lo que podría ayudar a vaciar esos cajones llenos hasta el borde de cables desordenados, enredados y en su mayoría inútiles.
Cuando se implemente el estándar, los consumidores europeos tendrán la opción de elegir comprar un nuevo dispositivo con o sin cargador, aunque esa desagregación podría volverse obligatoria más adelante. La Comisión Europea dice que también trabajará para “armonizar” la interoperabilidad de carga inalámbrica en un esfuerzo por impulsar la tecnología.
“Buscar el cargador adecuado, ya sea en casa o en el trabajo, puede ser bastante molesto”, dijo el ministro checo de Industria y Comercio, Jozef Síkela, en un comunicado. “Además, estos cargadores suman 11.000 toneladas de desechos electrónicos cada año. Tener un cargador que se adapte a varios dispositivos ahorrará dinero y tiempo y también nos ayudará a reducir los desechos electrónicos”.
El Parlamento Europeo votó a favor del nuevo estándar USB-C a principios de este mes por un abrumador margen de 602-13. Los teléfonos móviles, auriculares y otros dispositivos más pequeños deberán cumplir con el estándar para el otoño de 2024. Está previsto que ese estándar se extienda a los portátiles vendidos dentro de la UE para la primavera de 2026.
Los partidarios de la directiva a menudo citan la reducción de los desechos electrónicos dañinos para el medio ambiente como un motivo clave para la legislación. Empresas privadas como Samsung, Google e incluso Apple han tomado sus propias medidas para reducir el desperdicio optando dejar de vender adaptadores de corriente con ciertos dispositivos nuevos, aunque no sin una buena cantidad de resistencia.
El nuevo estándar de la UE se aplica técnicamente a todas las empresas tecnológicas que operan en la región, pero Apple es vista como el verdadero elefante multimillonario en la habitación. Durante años, Apple se ha apegado obstinadamente al cargador Lightning del iPhone, incluso cuando sus competidores se unieron en torno al USB-C. Los rumores citados a principios de este año por Bloomberg y el fiable analista de Apple Ming-Chi Kuo sugieren que ya se están realizando pruebas para reemplazar Lightning con USB-C en los futuros iPhone.
