La fuga habría sido un intento de la pareja de vivir una aventura y pasar tiempo a solas
Tamaña sorpresa se llevó la dueña del geriátrico argentino “El Pinar de Devoto”, en Buenos Aires, cuando se enteró de que un hombre y una mujer que residen en el hogar habían escapado del inmueble. Los ancianos, de 81 y 69 años respectivamente, robaron las llaves de la vivienda y tras salir dejaron encerrados a los otros cohabitantes y a los empleados del lugar.
Fue entonces que la propietaria se dirigió a la Comisaría Vecinal 11 B de la Policía de la Ciudad para denunciar el insólito suceso. La Fiscalía Nacional Correccional y Contravencional N.º 53 dio intervención a la División Personas Extraviadas de la fuerza porteña para lograr dar con el paradero de los ancianos.
Con la ayuda de las respectivas familias y la responsable del geriátrico, los oficiales comenzaron a hacer recorridos de barrida hasta que recibieron el llamado de una mujer que informó que había visto a la pareja caminando en la zona de las avenidas Beiró y 64, en la localidad de Villa Lynch, en el municipio de San Martín.
A unos 800 metros del lugar marcado por la persona que dio aviso, fue hallada la anciana. Según las fuentes consultadas por La Nación, la mujer se encontraba desorientada, pero en buen estado de salud. Antes de ser trasladada nuevamente al hogar, se solicitó una ambulancia de la obra social para que la revisen.
Mediante la asistencia de las cámaras de un restaurante de comidas rápidas de la zona y las filmaciones municipales, se halló luego al hombre. El anciano estaba a unas 28 cuadras de donde fue hallada la señora. Se encontraba en buen estado de salud. Finalmente, y tal como ocurriera con la mujer, fue trasladado junto a su hija al hogar para realizar su reingreso.
De acuerdo con el diario El Perfil, ambos padecen alzheimer y se conocieron un año atrás, cuando ingresaron al geriátrico. El amor floreció entre ellos y la pareja no se separaba nunca.
La fuga habría sido un intento de la pareja de vivir una aventura y pasar tiempo a solas, pero sus enfermedades no se los permitieron.
