Durante la madrugada del 3 de abril un grupo de mujeres que se plantó frente a la Fiscalía Regional de Chimalhuacán, para que no liberaran a los presuntos implicados en la detención de Irene Martínez, madre de una víctima de desaparción forzada y violencia sexual, fueron golpeadas y amedrentadas por uniformados con armas largas, como se aprecia un video en vivo.
Luego de que al lugar llegará Dylcia García Espinoza, fiscal Central para la Atención de Delitos Vinculados a la Violencia de Género para dialogar con Irene y las mujeres que la acompañaban.
En el video se ve como la fiscal revisa las heridas de Irene hasta que le pregunta “este te lo certificaron” y pide “den chance” de ver lo de los detenidos.
Minutos antes las activistas habían documentado la llegada de personas para “cercar” la manifestación, “no son chismosos son policías vestidos de civil esperando la orden para golpearnos. Responsabilizamos a la fiscalía de Chimalhuacán y a Alfredo del Mazo, directamente”, expresaron.
Para que seguido de la presencia de Dylcia Garcia y su entrada a las instalaciones de la fiscalía en otro video se ve descender de un vehículo a un grupo de hombres uniformados con armas largas. Hasta que se escuchan los gritos y luego sale una mujer con sangre en el rostro.
Las activistas denuncian que fueron gaseadas y al menos dos mujeres resultaron con lesiones en la cabeza y otras diferentes partes del cuerpo.
El sábado 2 de abril a las 20:40 horas aproximadamente, Irene Martínez Cervantes fue detenida por elementos municipales de Chimalhuacán, fue privada de su libertad, torturada e incomunicada.
Al no saber nada de su paradero, la defensora de derechos humanos Lidia Florencio se dirigió al ministerio público de Chimalhuacán donde negaron tener conocimiento de la detención, después acudió a la Fiscalía Regional de Chimalhuacán donde como primer informe negaron la detención y tener a Irene, más tarde fue informada que Irene fue trasladada al hospital en un ambulancia severamente golpeada por lo que se dirigieron hacia allá, donde de nuevo les negaron información y el motivo de sus lesiones.
Mientras tanto colectivas feministas iniciaron un plantón afuera de las instalaciones de la fiscalía porque aseguran que no hay pruebas suficientes para mantener detenidas a las policías de tránsito que presuntamente detuvieron a Irene por viajar en una moto robada, sin embargo la moto registrada en la carpeta de investigación no coincide.
Irene Martínez Cervantes presentó una denuncia en fiscalía de Chimalhuacán contra las policías de tránsito mujeres que la agredieron, pues además de demostrar que no hubo razones para su detención, los elementos tienen dentro de sus funciones las acciones que realizaron.
Al lugar también llegó la defensora de derechos humanos y madre de Mariana Lima Buendía, víctima de feminicidio.
