Cuando intentas dejar de fumar, la fuerza de voluntad puede fallarte
En la mayoría de los consumidores de tabaco, la necesidad de consumirlo puede ser muy poderoso. Pero no estás a merced de ese deseo. Cuando aparece la necesidad, recuerda que, aunque puede ser intensa, posiblemente pasará luego de 5 o 10 minutos, ya sea que fumes o no un cigarrillo o mastiques tabaco. A continuación te damos unos consejos para que la fuerza de voluntad no flaquee.
Terapia de reemplazo
Puedes usar nicotina con receta médica en un inhalador o aerosol nasal. También intenta con parches, goma de mascar y grageas de nicotina de venta libre. Asimismo, existen medicamentos para dejar de fumar que requieren prescripción, como bupropión y vareniclina.
Evita los desencadenantes
La necesidad de tabaco suele ser más fuerte en las situaciones y los lugares en los que fumabas o consumías tabaco con más frecuencia, como las fiestas o los bares, en escenarios estresantes o al beber café. Identifica los factores desencadenantes y ten un plan para evitarlos por completo o superarlos sin consumirlo.
Retrasa el deseo
Si sientes que vas a rendirte ante el deseo, oblígate a esperar 10 minutos más y luego haz algo para distraerte durante ese periodo.
Mastica algo
Mantén tu boca ocupada para lidiar con el deseo. Mastica goma de mascar, chupa caramelos duros sin azúcar o come zanahorias crudas, apio, frutos secos, semillas de girasol o alimentos crocantes que te satisfagan.
No fumes “solo uno”
Te puede tentar la idea de fumar solo un cigarrillo para satisfacer el deseo de consumir tabaco, pero no te engañes y creas que con uno solo alcanzará.
Recuerda que intentar hacer algo para vencer el deseo siempre es mejor que no hacer nada. Y cada vez que resistes el deseo de consumir tabaco, estás un paso más cerca de lograr una vida totalmente libre de él.
