Tete Rodríguez: entre fotografías, café y romanticismo

Tete Rodríguez: entre fotografías, café y romanticismo
LLUVIA ESTRADA / EL TIEMPO DE MONCLOVA

Tete es una joven de 24 años, enamorada de su trabajo. Carismática, sentimental y romántica. Ama el café, la fotografía y las mascotas.

“La vida no cuenta los pasos que haz dado, sino las huellas que has dejado” una de las frases que la carecteriza. La empresa que Tete dirige es con el dúo dinámico de su pareja, su novio Daniel, que siempre ha estado a su lado y la ha ayudado a fabricar cada sueño que ha pasado por su cabeza, él y su familia han sido pieza clave para poder concretar lo que se ha propuesto en los últimos años y la fortaleza que necesita cuando ha pensado que tal vez hacer otra cosa sería mejor, "me orientan cuando pierdo el rumbo y me recuerdan que la pasión por la fotografía me ayudará a hacer mi vida y ser más que feliz".

Capturar momentos importantes en la vida de los demás, es una pasión. ¿Qué fue lo que te impulso a profesionalizar ese amor?. 
En lo particular siento que soy una persona muy emocional, que vive cada uno de sus sentimiento al máximo y me encanta el poder capturar momentos tan especiales a través de mi lente, a través de mi mundo, de cómo lo veo, de cómo lo vivo yo misma. Creo que esto, y el formar parte de las historias, ver como mi trabajo puede hacer a mis clientes muy felices es lo que me motiva a seguir siendo una profesional.

Dicen que una fotografía dice más que la imagen que surge, ¿Alguna técnica en particular, que se ha convertido en tu mejor herramienta para brindar un extraordinario trabajo?. 
El conectar con las personas y las parejas ha sido un “boom” en mi crecimiento profesional. El saber un poco de su historia, conocer como son y en el momento de las fotografías, me encanta trabajar con dinámicas para que las fotos se vean lo más naturales y emocionales posibles. Me enfoco totalmente a capturar esos pequeños momentos que se me presentan.
El mundo fotográfico tiene muchas personas, ¿Por qué la gente elige a Tete?.
Soy una persona que le gusta hacer cosas y hacerlas bien. Siempre trato de dar lo mejor de mi y un poco más.
Soy una profesional que le gusta hacer el servicio a cliente muy personalizado. Siempre me tomo el tiempo para hablar con mis clientes, aclarar sus dudas y ser lo más empática posible. 
Conectar con ellos, conocerlos, saber que es lo que esperan de mí para brindarlo y así ganar todos, como dicen es un ganar, ganar.
Existen lemas que vamos adoptando en nuestra vida, por pruebas buenas y muy malas, ¿Una frase o un lema que tengas en tu trabajo?. 
Siempre hay algo nuevo que aprender, es parte de la humildad que todas las personas debemos de tener, siempre hay algo nuevo que aprender, nuevas técnicas, nuevas formas que te ayudan a pulir tu trabajo incluso tu forma de ser, eso que ayudará a darle un plus a lo que ofreces, eso hace que la gente te recomiende e incluso ellos mismos puedan contratarte de nuevo, contemplarte siempre. 
Ya son muchos eventos que ha cubierto, pero siempre uno, marca más que otro, ¿El trabajo que más ha tocado tu corazón?.
La pandemia ha dejado muchísimos estragos con su paso, y lo que más me ha tocado mi corazón, es haber impreso ampliaciones de fotografías para el funeral de clientes o familiares de clientes.

Que tan importante es tener fotografías, captar momentos, ¿Cómo lo traduces?. 
Al final de todo, lo único que quedan son los momentos especiales que viviste al lado de tu seres queridos, y el tener un recuerdo plasmado es el tesoro más valioso que puede haber. 
Yo lo traduzco como historias que quedarán para siempre en este mundo material, que podrán trascender a lo largo de las generaciones, disfrutarlas y como dicen siempre recordar es volver a vivir.

¿Qué podemos esperar de Tete en los próximos meses, hay proyectos en puerta?. 
Vienen muchas cosas buenas, en cuanto a servicios de fotografía y vídeo. Siempre en constante movimiento. 
A veces la agenda es pausada, pero sin esperar llegan proyectos en donde tenemos que inyectar alma cuerpo y corazón, esos que nos dejan un gran sabor de boca, que nos hacen ser mejores que antes y pulir lo que ofreceremos el día de mañana.
Ser paciente es una de mis virtudes y si ya tengo contemplado un evento que sé es de una gran magnitud por tiempos o distancias, ya no me comprometo con otro, eso es parte de lo que me identifica. Entender que es mejor la calidad que la cantidad, porque no por ganar un poco más voy a entregar menos de lo que esperan de mi. 

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