La estrella pop de 39 años aún está a la espera de que se realice el juicio que determinará el caso de la tutela legal.
Su historia comenzó hace cinco años, cuando ambos grabaron el video musical “Slumber Party”, en el cual la “Princesa del pop” llega a una fiesta en una mansión y se encuentra con Sam Asghari. Comenzaron a salir, fuera de la ficción, en 2017.
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El anuncio del compromiso se da a casi un mes después de que el padre de la cantante, James Spears, renunciara a su papel como tutor legal de su hija, pues desde el 2008 había sido el encargado de controlar su vida y patrimonio de cerca de 60 millones de dólares.
A través de sus redes sociales, Sam Asghari ha mostrado su apoyo a Britney para ser libre, incluso en febrero pasado lanzó un mensaje en Instagram a Jamie Spears, hermana de la cantante: “tengo cero respeto por alguien que intenta controlar nuestra relación y que pone constantemente obstáculos en nuestro camino”.
Hace dos semanas Britney escribió en la misma red social: “¡Este guapo no sólo ha estado conmigo en los años más duros y en los mejores de mi vida, sino que resulta ser un cocinero extremadamente bueno!”
