También está la parte tirana aquel que le pone el pie en el cuello al otro, sacerdote Claudio Longoria.
Existen personas que aman demasiado a otros, pero no se aman así mismo y por eso soportan injusticias, refirió el sacerdote durante la celebración eucarística de este domingo;“Dios nos dice ámense como yo los he amado, pero en la realidad parece algo confuso para nosotros”.Las exigencias del amor van mucho más allá al menos al estilo de Dios, van más allá al amor que como seres humanos nos prodigamos, no es que sea malo el amor que profesamos, pero no es como Dios quiere que nos amemos entre nosotros, dijo en la homilía el sacerdote Claudio Longoria, de la parroquia Santiago Apóstol.
“Como tiene que ser mi amor hacia los demás, hay personas que aman demasiado, pero tienen un desajuste porque no se aman a ellos mismos eso les permite aguantar una tras otra injustica pareciendo que es algo normal, es la parte pasiva; también está la parte tirana aquel que le pone el pie en el cuello al otro, lo somete cree que está haciendo de alguna manera lo correcto”.Mencionó que son situaciones que de manera particular se ven en el matrimonio o noviazgo, se va sometiendo uno al otro cayendo en una relación en donde la dignidad se ve pisoteada.
“La inclusión no tiene que ver con que tengas que soportar todo, algún motivo tendrá la otra persona para comportarse así, de alguna manera la dignidad me permite poner una especie de raya”, agregó.
