El sacerdote franciscano Gabriel Gutiérrez Ramírez, que dedicó su vida a trabajar con habitantes de calle de Bogotá, incluso en plena pandemia, falleció víctima del coronavirus y sus exequias tuvieron lugar este sábado, informó la Fundación Callejeros de la Misericordia.
"Hay luto en Bogotá y en Colombia por la partida del ángel de los habitantes de calle. El cielo, sin embargo, celebra la llegada de un alma generosa que lo entregó todo en estas tierras por los más pobres", escribió la Fundación, que fue creada por el fraile franciscano.
El sacerdote de 63 años, conocido como "Fray Ñero", término por el que suelen llamarse entre ellos los habitantes de la calle, falleció el Viernes Santo en la Clínica Marly, donde estaba ingresado desde hace tres semanas tras contagiarse de covid-19.
Hace pocos días y debido a las complicaciones de salud que tuvo Fray Ñero, el arzobispo de Bogotá, monseñor Luis José Rueda, pidió orar por el franciscano.
"Fray Gabriel Gutiérrez Ramírez, franciscano, un apóstol, un servidor de los habitantes de calle, salía a llevarles el alimento, salia a acompañarlos, a sanarlos, a cuidarlos, a defenderlos, a protegerlos", dijo el prelado al recordar la obra del franciscano.
Su obra "será recordada por siempre. Tu parche (grupo), tus compañeros, te lloramos y nunca te olvidaremos. Gracias por tanto", añadió la Fundación.
"Me dicen Fray Ñero porque entre ellos se tratan de 'ñeros' y es una palabra hermosa, pues significa compañero. Y que me tengan como compañero para mí es un orgullo muy grande", decía el franciscano al explicar el nombre por el que se conocía en la calle.
Habitantes de calle que se reunieron hoy en el centro de Bogotá recordaron con flores y pancartas a su ángel protector que siempre tuvo tiempo para escucharlos y llevarles un plato de comida.
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, lamentó en redes sociales el fallecimiento del sacerdote al que definió como un "guerrero y luchador de los derechos humanos de los habitantes de calle de Bogotá y Colombia".
"Seguiremos su obra y honraremos su legado con toda dedicación y más en un año tan difícil como este", añadió López.
Gutiérrez nació en Bogotá, se crió en Villavicencio, capital del departamento del Meta (centro) y tras su ordenación dedicó su vida a trabajar por los más pobres siguiendo los votos que hizo como discípulo de San Francisco de Asís.
Estuvo en una misión en Mozambique mientras que en Colombia sus pasos lo llevaron a estar en varios departamentos afectados por el conflicto armado como el Cauca (suroeste) y en el Meta.
Sin embargo, su labor tuvo más notoriedad en Bogotá en donde ayudó a miles de personas habitantes de calle, prostitutas y enfermos a los que llevaba comida y ropa.
