Tras abandonar su país natal, muchos se quedan en el camino
“En mi país la situación económica es difícil, hay mucha violencia y abusos contra las personas. Por eso decidí buscar al sueño americano. Desde hace 35 días me vine de Honduras”, compartió Luis Miguel, un migrante que llegó hace una semana a Monclova y no ha podido continuar su arriesgado camino hacia la frontera con Estados Unidos.
Coahuila es de uno de los estados del país con mayor flujo de migrantes. Familias completas de países de Centroamérica como Honduras, Guatemala y Venezuela, pasan por la entidad durante todo el año en su objetivo de alcanzar “el sueño americano”. De enero a mayo del 2021, el Instituto Nacional de Migración (INM) rescató a casi 400 personas que intentaban atravesar la frontera.
“Por cuestiones de seguridad los hemos retirado de la vía pública, porque arriesgan su integridad, sobre todo cuando cargan con menores” Hugo Morales, presidente de la CDHE.
Ilegal
Coahuila se encuentra dentro de las primeras 20 entidades en ese contexto nacional. De acuerdo con cifras del INM, 2 mil 448 migrantes extranjeros se quedaron a vivir en el estado el año pasado. Monclova es una de las ciudades en donde los inmigrantes hacen una pausa en su camino.
Luis Miguel, de 32 años, quien abandonó su país natal, dijo que emigrar de manera ilegal es un peligro porque en el intento se arriesga la vida. Hay migrantes que dejan a sus familias; otros deciden llevarlas con ellos. Aunque saben que viajar a la deriva de los vagones del tren es retar a cada segundo a la muerte.
Poco dinero
Relató que en Honduras trabajaba como ayudante de soldador y chofer de taxi; sin embargo, el poco dinero que sacaba en la jornada diaria no era suficiente para el sustento de su hogar.
“Allá nos queda muy poco dinero porque nos extorsionan, por eso nos arriesgamos a ir por el sueño americano. Sabemos que podemos morir en cualquier momento. Nos toca cruzar todo México. Yo he venido batallando mucho, es muy difícil ver que paisanos son aplastados por el tren. Además, no toda la gente te ayuda, en el camino te encuentras a gente mala”, expresó.
“Sabemos que podemos morir en cualquier momento. Es muy difícil ver morir a paisanos aplastados por el tren. No todos te ayudan, en el camino te encuentras gente mala”
Luis Miguel, migrante hondureño.
Discriminados
Mencionó que la mayoría de las personas ven a los migrantes como delincuentes. Hasta la Policía abusa de ellos y los discrimina solo por venir de otros países: “Desde que llegué aquí me quedo a dormir en las vías del tren. A veces los guardias me corren. Pasas por muchas cosas: los policías te ven y te amenazan con entregarte a Migración. ‘Móchate con algo’, nos dicen”.En Monclova sale a las principales avenidas a pedir dinero para comer. Su temor es que la policía migratoria lo detenga y lo lleve de regreso a su país, en donde la vida es complicada.
Infringen la ley
Respecto a la estadía de migrantes en la ciudad, el subdirector de la Policía Municipal, Sergio Montemayor Cobas, manifestó que el departamento de Seguridad Pública interviene cuando llegan a infringir la ley.
“Si hay un delito o falta administrativa, hablamos con las autoridades de migración. Ellos nos piden el apoyo para operativos y ya se encargan de investigar si están de manera legal. En los últimos meses no tenemos reportes de migrantes que hayan cometido delitos”, aseguró.Detalló que cuando se quedan a pernoctar en Monclova, los inmigrantes suelen pararse en cruceros a pedir apoyo a los automovilistas. “Por cuestiones de seguridad los hemos retirado de la vía pública, porque arriesgan su integridad, sobre todo cuando cargan con menores”, explicó.Derechos
Hugo Morales, presidente de la Comisión de Derechos Humanos en Coahuila, afirmó que la CDHE realiza diversas gestiones en favor de las personas en contexto de migración. En caso de que cometan un delito, la autoridad migratoria se encarga de dar seguimiento a su situación legal. Mientras que la dependencia a su cargo verifica que se respeten los derechos de las personas.
Cuando se trata de menores, se realizan acciones con el fin de que se reúnan con sus familiares y se resuelva su situación migratoria para que retornen a sus países de origen.
2,448 migrantes extranjeros se quedaron a vivir en Coahuila el año pasado.
