La Constitución democrática de 1996 reconoce el rol de los líderes tradicionales en Sudáfrica
Johannesburgo,- Los zulúes, etnia mayoritaria en Sudáfrica, iniciaron hoy los homenajes póstumos a la reina regente Mantfombi Dlamini Zulu, acompañando sus restos mortales antes de ser enterrados esta madrugada en una ceremonia privada.
"Es un momento triste para la nación zulú y para todo el país", indicó durante este acto de homenaje la ministra de Desarrollo Social, Lindiwe Zulu, en nombre del Gobierno sudafricano.
El féretro fue despedido con honores esta mañana en Johannesburgo a su salida del laboratorio forense donde se le había realizado la autopsia tras su fallecimiento el día 29, con presencia de las "amatshitshi" (doncellas) de la reina, representantes de la familia real zulú, de la casa real de Esuatini (de donde era originaria la fallecida) y de autoridades políticas.
También se congregaron en las calles cercanas decenas de zulúes, la mayoría ataviados con trajes tradicionales -como el de sus guerreros, con pieles de leopardo, escudo y lanza- para rendirle tributo antes de su último viaje hacia la residencia oficial de la casa real zulú, ubicada en la provincia de Kwazulu-Natal (este).
La llegada de la comitiva fúnebre a esta región oriental, hogar de la mayor parte de los miembros de esta etnia, fue igualmente saludada a su paso por las calles y carreteras.
A última hora de la tarde, los restos mortales llegaron al palacio real KwaKhethomthandayo, en Nongoma, donde la familia celebrará de madrugada la ceremonia de despedida tradicional y el entierro, en la más estricta intimidad, por deseo de la difunta.
Asimismo, este viernes se celebrará un funeral oficial al que se espera que acudan representantes del Gobierno sudafricano, expresidentes y miembros de la casa real de la vecina Esuatini.
UNA COMPLICADA SUCESIÓN AL TRONO PARA LA MONARQUÍA ZULÚ
Hija del rey Sobhuza II (1899-1982) y hermana del actual monarca de Esuatini, Mswati III, la reina Mantfombi murió en Johannesburgo el pasado 29 de abril, por causas aún no reveladas, a la edad de 65 años.
Actuaba como reina regente del pueblo zulú desde la muerte a mediados de marzo pasado de su marido, el rey Goodwill Zwelithini, y estaba previsto que cumpliera ese papel durante los tres meses de luto que la familia real había declarado para honrar al fallecido monarca zulú y definir su complicada sucesión.
La reina Mantfombi ocupaba el rango más alto entre las viudas del rey Goodwill Zwelithini por ser de ascendencia noble -pese a ser cronológicamente la tercera- y su hijo, el príncipe Misuzulu, es ahora uno de los favoritos para la sucesión.
Tradicionalmente, tras la muerte del rey, la corona corresponde al hijo mayor de la primera de las esposas del soberano, pero el primogénito de los 28 hijos de Zwelithini falleció en 2020.
Esta situación ha desatado un enfrentamiento de facciones dentro de la casa real, con acusaciones públicas por parte de algunos miembros que aseguran estar siendo excluidos de las deliberaciones familiares.
Se ha denunciado ante la Justicia, incluso, la presunta falsificación del testamento del rey Zwelithini, que no se hizo público.
"Están avergonzando a la familia real", advirtió con severidad el político y príncipe zulú Mangosuthu Buthelezi, que ejerce de primer ministro de la casa real zulú.
La Constitución democrática de 1996 reconoce el rol de los líderes tradicionales en Sudáfrica y, aunque les otorga un papel ceremonial y no ejecutivo, instituciones como la familia real zulú mantienen una influyente posición social y política.
Los zulúes, que suponen entre 10 y 12 millones de personas, componen la etnia más populosa de Sudáfrica, cuya población se sitúa en algo más de 58 millones de habitantes.
