Los bomberos de Monclova: un ejemplo de vocación y servicio

En 1978 se fundó el Heroico Cuerpo de Bomberos en la ciudad.

Conocidos como héroes anónimos por entregar su tiempo, su esfuerzo y, en ocasiones, hasta su vida, los bomberos celebran hoy su día. Hace 148 años se instituyó en México el 22 de agosto como fecha conmemorativa del Día Nacional del Bombero. En Monclova hombres y mujeres realizan día a día esta noble y arriesgada labor.

Fue en Veracruz donde se formó el primer cuerpo de bomberos del país. A raíz de eso empezaron a crearse en otros estados de la República por las necesidades, crecimiento e industrialización. Eso fue generado que se constituyeran más grupos de apoyo a emergencias.

Fundador

Hace 43 años se fundó en esta ciudad el hoy llamado Heroico Cuerpo de Bomberos. El comandante Fernando de los Santos fue su creador en 1978, razón por la que cada año se conmemora este día en el que se reconoce la valentía de tres bomberos que murieron en cumplimiento de su deber.

De los Santos era jefe del área de Seguridad en Altos Hornos de México. Desde ahí surgió la iniciativa de crear el Cuerpo de Bomberos, al ver el crecimiento y fortalecimiento de ciudad. Le siguieron en su proyecto Jaime Alves y Antonio Cázares, pilares de la institución.

Lección

Julio Ríos Cortez, de 37 años y padre de dos hijos, es el actual comandante de Bomberos en la ciudad. Compartió que lleva 12 años de servicio, tiempo en el que le ha tocado vivir situaciones de riesgo. Una de los momentos más difíciles en su trayectoria como bombero fue durante la explosión de Celemania, en el 2007.

“Ese día nos dimos cuenta de que no estábamos preparados, nos faltaban ambulancias, bomberos, equipo. Ese evento marcó a la Región Centro del estado y nos dejó como lección que tenemos que seguirnos preparando todos los días. Desafortunadamente se perdieron muchas vidas”, expresó.

Vocación

Cortez Ríos manifestó que para ser bombero se requieren muchas ganas, pero lo más importante es tener el don de servicio y vocación. “Es un trabajo muy noble, de entrega. El que está aquí es porque le gusta, no tanto por lo que va recibir de remuneración”, aseguró.

Sueño

José Damián Escobar, quien tiene una década de servicio, relató que desde niño le llamó la atención la labor de los “apagafuegos”: “Me acuerdo que escuchaba la sirena y me emocionada. Decía: “Yo quiero trabajar en eso”. Cuando cumplí 16 me ofrecí como voluntario. Y aquí sigo, cumpliendo mi sueño de la infancia. A pesar del riesgo, me gusta servir a la gente”.

Oportunidad

Juan Fernando Rodríguez llegó en 1997 al Heroico Cuerpo de Bomberos de Monclova. Desde entonces, todos los días sabe que podría no regresar a su hogar, donde lo esperan su esposa e hijos. Sin embargo, la noble labor que realiza es el anhelo que tuvo desde niño.

A lo largo de los años le ha tocado estar en medio de contingencias como el huracán “Alex” o el incendio del Hotel Internacional. Pero el momento que más ha marcado su vida fue cuando un compañero falleció en un accidente automovilístico en el que le tocó estar presente.

“La sensibilidad llega. Uno se siente fuerte cuando pasa algo así, pero hay ocasiones en las que ves el peligro y se te pone la piel de gallina. Por eso siempre que salgo a trabajar les digo a mis hijos que este trabajo es de mucho riesgo, y le pido a Dios que nunca me pase nada”, expresó.

Alertas

El equipo de seguridad de un bombero está compuesto por un casco de protección, chaquetón y pantalón, botas especiales que están cubiertas de placa de acero, guantes y la monja para cubrir el rostro.

Timbra la alarma en cualquier momento, en el día, en la noche, en la madrugada. Los bomberos tienen menos de un minuto para ponerse su equipo, subir a la unidad y salir a cubrir la emergencia. Poniendo el corazón, el entusiasmo y su vida, es como a diario trabajan los héroes anónimos.

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