Se busca la certeza para alumnos, personal e instalaciones.
L a fuerza de seguridad para el cuidado del patrimonio, estudiantes y trabajadores de la Universidad Autónoma de Coahuila ha crecido un 30 por ciento, y se espera que al entrar a clases presenciales en enero aumente el número de vigilantes y guardias en el estado.
Marcelo Lara Saucedo, responsable de la seguridad de la institución, mencionó que actualmente se cuenta con 150 elementos de los que, 115 están asignados para las oficinas y campus de Saltillo.
Entre las incidencias detectadas, se encuentran algunos robos en la infraestructura, asaltos a estudiantes y hasta casos de alumnas acosadas sexualmente que fueron atendidas dentro del protocolo “No Estás Sola”.
Sobre la detección de venta y uso de enervantes al interior, dijo que en los últimos meses no se ha presentado.
En tanto que de la Unidad Campo Redondo aceptó que es un foco rojo cuando se tienen clases normales, ya que es paso de muchas personas en su perímetro donde se han denunciado algunos asaltos a estudiantes.
Destacó que los guardias mantienen una estrecha comunicación y coordinación con las policías municipales de los municipios donde hay instalaciones universitarias.
“Tenemos al personal de seguridad en todo el estado; es una instrucción que ha dado el rector Salvador Hernández Vélez que en este tema no se afloje porque al final es resguardar el patrimonio de la universidad”, explicó.
Comentó que tan sólo de nómina, uniformes, equipamiento y capacitación de los guardias de seguridad, se asigna un presupuesto que ronda en los 200 mil pesos anuales, más la inversión en cámaras y accesos controlados.
