La armadora terminó sus reservas y ahora no esperará más para que se regularice el mercado.
Tras meses de esperar que los fabricantes de semiconductores resolvieran los cuellos de botella y restablecieran el abasto de chips, los fabricantes de vehículos finalmente están tomando una actitud proactiva frente a la escasez de estos diminutos componentes. Hyundai tiene planes para desarrollar sus propios semiconductores con el fin de reducir la dependencia de los fabricantes externos.
A lo largo del año, las armadoras han visto disminuir las ventas porque no pueden fabricar suficientes automóviles. Algunas incluso han tenido que detener durante meses sus fábricas ante la falta de componentes que requieren de chips para su funcionamiento, como las pantallas, los cargadores inalámbricos o los radares y las cámaras necesarias para las asistencias a la conducción.
AfectaciónHyundai, que había mantenido durante el primer semestre del año un abasto de vehículos estable desde sus plantas hacia sus pisos de venta, finalmente tuvo que parar algunas fábricas en agosto y septiembre, tras acabarse su reserva de chips. Esto ha afectado la oferta de modelos en sus pisos de venta alrededor del mundo.
En México, las ventas de la marca bajaron 17.8% en octubre, comparado con el mismo mes de 2020. En noviembre cayeron 12.6%. “Los resultados no reflejan el nivel que veníamos entregando antes de que empezara el desabasto de chips. Hoy tenemos escasez en todos los modelos que vendemos en México y listas de espera de dos o tres meses”, dice Edgar Carranza, director de operaciones de Hyundai México, quien es el nuevo líder de la automotriz en el país.
Semiconductores. Todos los autos nuevos hoy tienen chips y los más tecnológicos -aquellos que ya incorporan funciones de conducción semiautónoma, clústers digitales o realidad aumentada en las pantallas- llegan a tener hasta 2,000 semiconductores en su interior. La necesidad de estas pequeñas piezas nunca ha sido tan fuerte y lo será aún más conforme la conducción autónoma y la electrificación continúen expandiéndose por las líneas de producción.
Hyundai no quiere quedarse sin suministro nuevamente y buscará ser más autosuficiente. Aunque desarrollar chips internamente requeriría algunos años e inversiones millonarias, Carranza dijo que es "algo en lo que la compañía está trabajando".
Esto no es algo ajeno para el fabricante surcoreano, que tiene un modelo de negocios integrado verticalmente, lo que quiere decir que produce varios de los insumos que requiere para sus autos a través de otras subsidiarias. Hyundai Steel, por ejemplo, produce aceros de alta resistencia, Hyundai Wia suministra motores de automóviles, consolas y sistemas 4WD, mientras que Hyundai Mobis fabrica repuestos. Ahora, el grupo también buscará producir sus propios semiconductores.
Carranza visualiza que la escasez de chips persistirá durante la primera mitad de 2022, con lo que visualiza un primer semestre “un poco complicado” para la marca en México. “Vemos una recuperación hacia el final del segundo semestre del próximo año”.
Afectación. La escasez de chips semiconductores está afectando a la industria automotriz de manera significativa en los últimos meses.
Irónico que esta diminuta parte del vehículo se esté convirtiendo en un gran dolor de cabeza en México y en todo el mundo. Para ilustrar esto, tan sólo en julio de 2021, en el país se dejaron de ensamblar 81.671 autos por falta de semiconductores, mientras que en junio el número había sido de 33.950 unidades menos, de acuerdo con la Industria Nacional de Autopartes (INA).
