La actriz de origen afroamericano, le dio un giro a la historia cliché de superación personal.
Este 24 de noviembre se lanzó Herida por la plataforma de streaming Netflix, una película protagonizada por la actriz Halle Berry, quien alguna vez fue una de las chicas Bond más aclamada ahora se convirtió en una boxeadora con un cúmulo enorme de traumas y problemas.
Las celebridades en algún punto de su carrera buscan tener un acenso dentro de la industria del entretenimiento; tal es el caso de Halle, quien en la película Herida nos mostró un lado mucho más crudo, serio y fuerte.
La actriz de origen afroamericano de 55 años, le dio un giro a la historia cliché de superación personal.
“Jackie Justice es una luchadora de artes marciales mixtas que se aleja del deporte tras caer en desgracia. Cargada de mala suerte, ira y arrepentimiento aún años después, su representante y novio Desi (Adan Canto) la convence de participar en una brutal pelea clandestina, con lo que consigue llamar la atención de un promotor de la liga de las luchas”, se puede leer en la sinopsis de la cinta dirigida por esta actriz.
A pesar de que la trama de esta película es ambiciosa, la crítica no ha tomado nada bien esta incursión de Halle en la dirección; algunos indican que lo que hizo en la pantalla puede caer en lo “cursi” o en el estereotipo; mientras que otros celebraron este giro en su carrera.
“Su camino hacia la redención toma giros inesperados y muy personales cuando Manny el hijo al que renunció cuando era un bebé, se aparece en la puerta de su casa. Herida marca el debut como directora de Halle Berry, y el elenco incluye a Adriane Lenox, Sheila Atim, Valentina Shevchenko y Stephen McKinley Henderson”, comparten en Netflix.
