Habitantes de la Junta Auxiliar de San Pablo Xochimehuacan, donde ocurrió una explosión en un ducto de gas, rompieron el cerco de seguridad de la denominada "zona cero".
Los pobladores sacaron parte de sus pertenencias que se encontraban en sus viviendas cerradas desde el domingo pasado cuando ocurrió la accidente por una toma clandestina.
Ante la mirada efectivos del Ejército mexicano, Guardia Nacional y policías locales ingresaron a sus viviendas por rescatar cosas de valor.
Al dar inicio la remoción de escombros de la principal zona afectada, los pobladores ingresaron a la fuerza y sin custodia policial a sacar sus pertenencias.
Pantallas de televisión, ropa, muebles, refrigeradores y hasta vehículos fueron extraídos por los vecinos.
El secretario de Infraestructura del Gobierno del Estado, Juan Daniel Gámez Murillo, reveló durante la mañana de hoy que la Secretaría de la Defensa Nacional les liberó el área afectada, por lo cual ahora quedará a cargo de la autoridad civil para remover escombros.
En conferencia de prensa encabezada por el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, informó que por ello iniciaron el retiro de escombros en un entronque de la zona siniestrada.
Y se espera que en un lapso dos semanas retiren escombros y lleven a cabo la demolición de casas habitación afectadas en su totalidad por la explosión.
Detalló que la demolición deberá hacerse con mucho cuidado, pues existen casas afectadas en su totalidad que colindan con otras que no presentan daños mayores.
