Una tradición mexicana que se fue apagando poco a poco y el COVID-19 terminó de rematarla
Por diversos factores que se fueron entrelazando, de poco a poco el amplio gusto por la música de los llamados ¨fara-fara¨ se ha ido perdiendo en la localidad, primero porque la aguda crisis que se enfrenta y que llevó incluso a que las cantinas donde acostumbran trabajar los músicos en ese estilo llegaron a quedarse sin ¨borrachos´, después el azote de la pandemia que ¨contagió¨ a decenas que de ello vivían y para no variar, la tecnología, pues ahora con las conocidas bocinas amplificadas, no se necesita pagar más.
Sencillo, concreto y sobre todo directo en sus palabras, Alejandro Torres Tonché, conocido personaje de la música local, hizo un breve recuento de la complicada situación que hoy enfrentan muchos que como él se dedican o dedicaban a la música, y tal como él lo dice ¨dedicaban¨ porque ahora se vieron obligados a buscar en otros rubros su modus vivendi.
UN TROVADOR NATURAL
Trovador natural y amante añejo de las cuerdas de su guitarra, Alex o Tonché como muchos le conocen, expresó que, aunque hoy a un año de la pandemia el ¨fara-fara¨ está prácticamente extinto, no solo fue la ¨infección¨ que sufrieron cientos de músicos que con acordeón y bajo sexto lograban su modus vivendi.
YA NO HABÍA A QUIÉN CANTARLE
Recordó que desde antes de la llegada de la pandemia a Monclova y esta región, los efectos nocivos se comenzaban a sentir, porque se empezaba a marcar ya la falta de circulante económico en la región por el tema AHMSA y eso se notó dijo, en la ausencia de ¨borrachos¨ en las cantinas donde ya no había a quien cantarle para obtener recursos.
LLEGÓ LAPANDEMIA Y CIERRE DE CANTINAS
Pero no sólo eso, a lo difícil de la economía se le sumó la pandemia que vino a generar primero reducción en horarios, después cierre temporal y aunque hoy se abren nuevamente las cantinas o bares, sigue la crisis económica en la región.
HAN ABANDONADO SU ARTE
Y qué decir de la tecnología, pues hoy en día aseguró el trovador, para muchos resulta más económico poner en su hogar, en su reunión una bocina que le resulta mucho más barato que contratar un ¨fara-fara¨ y los pocos que hoy trabajan han abaratado su arte ante la enorme necesidad de al menos lograr algo de recurso para poder subsistir.
