La ONG Médicos Sin Fronteras expresó en un comunicado su horror "por el brutal asesinato de tres compañeros en Etiopía"
Madrid,- España ya está realizando gestiones administrativas para agilizar al máximo la repatriación de los restos mortales de la cooperante española María H., asesinada en Etiopía junto con dos colegas de este país, todos empleados de Médicos Sin Fronteras (MSF), informó este viernes el Ministerio de Asuntos Exteriores español.
Los tres fueron asesinados este pasado jueves en un ataque en la región de Tigray, en el norte de Etiopía, que está sumida en una guerra desde el pasado noviembre, según la ONG.
Exteriores expresó su más sentido pésame a los familiares de la española fallecida, está en contacto con las autoridades etíopes para esclarecer los hechos y desde la Embajada de España en aquel país "se están haciendo todos las gestiones administrativas necesarias para agilizar al máximo la repatriación del cuerpo".
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, transmitió a través de Twitter "un sentido abrazo a la familia y compañeros de María", junto a su pésame también a los familiares de los otros dos cooperantes, "víctimas igualmente de este brutal ataque".
La ministra española de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, manifestó en la misma red social su "gran tristeza por el asesinato de tres cooperantes de Médicos sin Fronteras, en un mensaje en el que dio el pésame a los familiares y amigos de la fallecida y destacó que está en contacto con las autoridades etíopes para esclarecer los hechos y repatriar el cadáver.
La ONG Médicos Sin Fronteras expresó en un comunicado su horror "por el brutal asesinato de tres compañeros en Etiopía", con los que perdieron el contacto el jueves, tras lo que este viernes "el vehículo ha sido hallado vacío y, a unos metros de distancia, sus cuerpos sin vida".
"Hoy es un día terrible de duelo. Condenamos con dureza el ataque que ha costado la vida a tres de nuestros compañeros y sufrimiento a sus familiares y seres queridos, y que tendrá consecuencias dramáticas para la asistencia a las poblaciones a las que María, Yohannes y Tedros servían", añadió.
María H., que tenía 35 años, inició su trabajo en la ONG en 2015 en la República Centroafricana y desde entonces había trabajado en Yemen, México y Nigeria.
