Restricciones de la pandemia, impiden a la tercera edad ingresar a la casa de Dios
Para acercarse a Dios no hay pretextos, ni siquiera las restricciones de la pandemia lo pueden impedir, así lo dejó ver una pareja de adultos mayores que desde afuera del templo católico escucharon la misa dominical.
Al exterior de la parroquia Santiago Apóstol, siguieron la celebración eucarística pues el ser parte de la población vulnerable a la contingencia, no tienen la posibilidad de entrar.
Recargados sobre la barda de la iglesia y con la fe en Dios, escucharon la homilía del sacerdote que habló sobre la conversión que deben tener los católicos y las personas en general en este tiempo de cuaresma.
De esta manera la pareja de adultos mayores esperanzados a que pronto pase la pandemia, se acercaron a la casa de Dios y aunque por ahora no pudieron entrar, desde el exterior reafirmaron su fe.
Hasta ahora las autoridades eclesiásticas no han hablado sobre la posibilidad de que las personas mayores de 60 años, asistan a las misas, pues aún no ha pasado el riesgo de la contingencia.
