Lo más sublime es transmitir el gusto por el deporte a los hijos
No cabe duda que practicar un deporte con alma, corazón y mente es estupendo, pero transmitir ese amor por el deporte a los hijos, es verdad, es sublime.
Con el paso del tiempo se ha observado este paso de “estafeta” de un padre a su hijo por el gusto del deporte, llámese fútbol, béisbol, atletismo, etcétera.
En esta ocasión lo observamos en una verdadera leyenda viviente como es el amigo Beto Cruz, quien tiene toda una vida inmerso dentro del deporte.
Excelente basquetbolista en la época de “Milo” Martínez, pues formó parte de sus equipos y de sus selecciones que pusieron en alto a Coahuila.
Luego pasó a practicar el atletismo y dejó huella perene en este deporte, pero lo mejor, es que pase el gusto a su hija.
Su hija Daniela Cruz Arellano ha estado abrazando al atletismo como su deporte favorito, gracias a su padre que se muestra orgulloso de ella porque ya empieza a ganar sus propias carreras.
