De niño soñó con ser bombero; hoy sus hijos quieren imitarlo

Julio César Mendoza Rodríguez, bombero desde hace 13 años en Frontera

FRONTERA, COAH.- Padre de ocho hijos se arriesga día a día para demostrar que es un papá ejemplar, ante sus primogénitos y ante la sociedad, se trata de Julio César Mendoza Rodríguez, bombero desde hace 13 años, un trabajo que ama, aunque arriesgue su vida.

Luego de ver en sus hermanos la gran hazaña que realizaba al pertenecer al grupo de Cruz Ámbar, nació en él una necesidad por ayudar al prójimo en situaciones de riesgo sin importar que en una de estas ocasiones pudiera salir lastimado.

Gracias a su dedicación por 13 años, hoy en día se encuentra agradecido por ser una inspiración para los jóvenes que desde niños han soñado con ser bomberos al igual que él.

UN BOMBERO Y PADRE EJEMPLAR

Mendoza como sus compañeros lo conocen, por trece años ha servido a la comunidad dando lo mejor de sí para ayuda en cualquier situación de riesgo, principalmente los incendios que ha combatido durante todo este tiempo.

“Mis hijos los más pequeños son los que más vienen aquí, han estado conviviendo con nosotros”, dijo el bombero Mendoza quien es padre de ocho hijos, asegurando que en ellos ha sembrado el gusto por su profesión.

Asimismo, dos de sus hijos, están ansiosos por estudiar la carrera de enfermería y entrar al departamento de bomberos.

APOYA LAS DECISIONES DE SUS HIJOS

“Yo no puedo quitar ni limitar la iniciativa que ellos tienen, si no se estaría rompiendo un vínculo con uno mismo y el trabajo”, dijo Julio César Mendoza asegurando que dos de sus hijos se interesan en esta bonita labor.

Aunque el instinto de padre es siempre proteger a los hijos el señor Mendoza dice que no puede romper con el deseo e iniciativa que ellos tienen, pues es algo que al fin de cuentas inculcó su padre desde pequeños dándoles el ejemplo de salvar a las personas.

Al igual que él externa el apoyo a sus hijos dijo que, su gusto por esto nació gracias a sus hermanos que al crearse Cruz Ámbar entraron a trabajar como voluntarios, prosperando cada día más y así fue la incertidumbre que salió a la luz ingresando al Club de rescate SOS y posteriormente ingresó a formar parte del equipo de bomberos.

DIFÍCIL TAREA DEL BOMBERO

El brindar el apoyo a la ciudadanía también es difícil pues a veces hay accidentes de riesgo o demasiado fuertes que han marcado la vida del señor Mendoza, quien dice en el momento de trabajar solamente tienes cabeza para salvar a las personas.

“En cualquier situación por más mínima que sea el riesgo es latente, mi trabajo es un riesgo”, dijo el bombero quien recuerda el incidente en Celemania donde un centenar de personas perdieron la vida, un accidente que se quedó en la memoria de muchos, pero más en aquellos héroes como Mendoza que lucharon por salvar a todo aquel que pudieran.

“Lo más difícil de mi trabajo es ver en riesgo a un niño, un amigo o un familiar”, dijo Julio César.

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