Sobre el desempleo en el arranque de 2021
Aún no terminamos la primera semana de este nuevo año y las noticias que se refieren al empleo en la zona centro de Coahuila no dan muchas esperanzas. Lo anterior derivado de las declaraciones principalmente de la industria constructora, la cual se vio duramente golpeada a causa de la pandemia.
La Cámara Mexicana de la Industria y la Construcción (CMIC) reporta que durante el año pasado se perdieron 20 mil fuentes de trabajo por falta de obras principalmente provenientes del Gobierno Federal y, agravando esta cifra, se prevé que se sumen 3 mil más en las próximas semanas.
Sin embargo, esta previsión es simplemente para el inicio de año, ya que, si la reactivación económica se sigue retrasando, la cifra de desempleados inminentes irá en aumento, clavando aún más la daga en la herida que aún no sana de esta tan golpeada zona. Zona que depende casi por completo de la industria.
Ni hablar sobre el tema de Altos Hornos de México (AHMSA), que sigue sumando, además de desempleo, la carencia de contratos para el ramo constructor, pero no es el único que se ve afectado; todas las empresas subsidiarias eléctricas, administrativas, contables y demás están en la misma situación.
Lamentablemente en esta época de pandemia, la región, con todo su arsenal industrial y siderúrgico, ha sido de los más golpeados y siendo estos rubros los que más empleos generaban, la contraparte obviamente siempre será un alto número de familias sin sustento. Más aún por la situación legal en la que el gigante del acero se vio involucrado desde principios del año pasado generando un alto grado de incertidumbre y que hasta la fecha no ha dado más luz de la que dio durante todo el 2020.
Aún cuando las acciones de la familia Ancira ya pertenecen a Villacero, los baches aún se prevén por un largo tiempo y la industria constructora definitivamente no debería esperanzarse a este ‘cambio’ de dueño, pero sí definitivamente presionar a la Federación para que la reactivación de obras comience cuanto antes.
Y como se comentaba en párrafos anteriores, el desempleo no es tan sólo de un sector; la empresa Trinity, dedicada a la producción de tapas para carros tanques de ferrocarril y que en un inicio generaba un total de 800 empleos directos en Castaños, también anunció que debido a este tan atípico panorama económico tendrá como último recurso reajustar 230 fuentes de empleo.
Pero la cosa no para ahí. Debido a que cada vez se vuelve más insostenible la estabilidad de la familia de empleados con los que cuenta actualmente, esta cifra podría aumentar sin aviso previo de una semana a otra y todo debido a la contracción de la economía en la que estamos aún sumergidos.
Claro queda que la llegada de la vacuna simplemente es el comienzo de la lenta recuperación que teóricamente debería haber comenzado la última semana del año que terminó y que debería culminar a mediados de este 2021, pero con todo lo que se ha visto, la duda es lo más sensato que podemos tener.
Por lo pronto, lo único que nos queda es seguir con la cabeza arriba y tratar de seguir avanzando en la medida de lo posible, como buenos norteños que somos.
Pa’trás ni para agarrar vuelo. ¡Ánimo, Coahuilense!
Twitter: @rockrdz
E-mail: [email protected]
