Es Licenciado en Ciencias de la Comunicación, pero todos los días se caracteriza como hombre de plata para salir adelante con su show urbano.
En medio de vehículos, sobre el asfalto y aguantando los intensos calores de la ciudad, bajo un tono plateado para llamar la atención, es cómo pasa el día en busca de su sustento Eduardo Enrique Santiago Lar, quien, a pesar de ser Licenciado en Ciencias de la Comunicación, encontró en el malabarismo urbano sus modus vivendi desde 12 años atrás.
Con 36 años de edad, originario de la Ciudad de México, del mero Iztapalapa como él detalla, Eduardo lleva un mes en Monclova realizando su actividad como artista urbano, pero de una forma muy singular al convertirse en el hombre de plata ya que cubre la totalidad de su cuerpo con pintura a base de aceite para bebe y maquillaje.
Titulado como Licenciado en Ciencias de la Comunicación, Eduardo asegura que tras hacer sus prácticas en una agencia noticiosa de nivel nacional, se percató que el contenido o las cosas aprendidas en las aulas, son tan distintas a lo que en realidad se vive en el día a día, que optó por retirarse de medios informativos e iniciar su ´carrera´ como trota mundo, pues a la fecha ha recorrido casi todos los estados del país excepto Baja California y Quintana Roo.
Asegura que lleva 12 años dedicándose al trabajo urbano bajo el tono plateado que ocupa en su cuerpo para llamar la atención, lo que le ha dado hasta el momento el resultado que le permite hacerse de recursos para poder pagar su estadía en cada lugar que asiste como es el caso de Monclova donde paga 80 pesos diarios por el cuarto que ocupa para descansar.
Teniendo familia en la ciudad de México, papá, mamá, hermanas y novia, el malabarista urbano asegura que inicia su faena diaria desde las 9:00 de la mañana y hasta pasada la una de la tarde y por las tardes después de las 4:00 pues su meta fija a conseguir por día son 500 pesos.
¨Yo tengo esa meta, gasto 80 pesos diarios de hospedaje, compro mis alimentos, fumo gasto 49 pesos de mis cigarros y por eso todos los días no dejo de trabajar hasta conseguir 500 pesos para solventar mis necesidades y además lograr enviar dinero a mi familia¨, aseguró Eduardo antes de ponerse frente a los vehículos en los carriles de circulación del bulevar Pape esquina con Ecuador en esta ciudad.
