"Los residentes deben posponer las bodas, celebrar funerales cortos, no organizar banquetes y reducir las reuniones innecesarias”.
El país donde surgió la pandemia por COVID-19 encendió los focos rojos tras el rebrote de casos, cancelando viajes, bodas y funerales, como medida de prevención.
China, redujo sus contagios a mínimo gracias a las medidas de tolerancia cero que conlleva al cierre de fronteras, confinamiento y periodos de cuarentena.
A pesar de que los rebrotes han sido bajos, son localidades donde se reciben miles de turistas, por lo que se cancelaron varios viajes entre provincias.
Aunque el número de casos sigue siendo mucho más bajo que en la mayoría de los países, con 48 nuevos contagios notificados este viernes. Las autoridades prefieren no arriesgarse e impusieron a decenas de miles de personas en Pekín, ciudad que albergará los Juegos Olímpicos de Invierno en febrero, confinarse después de que se detectaran algunos casos de coronavirus.
Los residentes deben “posponer las bodas, celebrar funerales cortos, no organizar banquetes y reducir las reuniones innecesarias”, declaró este viernes el subdirector del centro de control de enfermedades, Pang Xinghuo en una rueda de prensa.
