Control de Accidentes hizo su agosto
Una aparatosa volcadura registrada la madrugada de ayer sobre el bulevar Pape, dejó como resultado dos personas lesionadas y pérdida total del vehículo participante, donde la velocidad y la inexperiencia al conducir de un joven, fue el factor que originó el accidente automovilístico.
“Sólo le pedí el carro a mi papá, para ir por unos tacos para cenar”, así dijo el conductor del automóvil que terminó volcado, después de impactarse contar una luminaria del camellón central que divide los dos carriles de circulación, la cual frenó su loca carrera.
Fue minutos antes de las 05:00 de la mañana, cuando se desplazaba un vehículo marca Nissan tipo March color blanco, en sentido de sur a norte sobre la mencionada arteria vial.
El cual era conducido por Cristo Fabián Castro Velázquez de 18 años de edad, quien se hacía acompañar de un amigo.
El joven conductor circulaba a más de 120 kilómetros por hora, lo que ocasionó que perdiera el control del volante metros antes de llegar al bulevar Francisco I Madero.
Al momento del impacto el automóvil se proyecto de frente contra una luminaria, la cual sirvió de parapeto, de lo contrario el automóvil hubiera invadido el carril contrario de circulación donde en esos momentos circulaban más automovilistas.
Así mismo elementos del departamento de Control de Accidentes, realizaron el croquis correspondiente, mientras elementos del heroico cuerpo de Bomberos, realizaban maniobras en la carretera, debido al derrame de combustible y aceite que dejó el carro volcado.
De manera extra oficial, el responsable tuvo que darle presuntamente a los elementos de Control y Accidentes la cantidad de 40 mil pesos en efectivo, para que el seguro fuera válido ya que el vehículo se encuentra a nombre de la mamá del jovencito.
Asimismo presuntamente se les entregó dicha cantidad, que exigieron a las primeras horas del día, para que pudieran “echarle la mano” y no tuviera problema alguno.
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